
La idea de que Argentina tiene autos 0 km muy caros está instalada desde hace muchos años. La comparación habitual es respecto a los países vecinos como Brasil, Uruguay o Chile. Si bien son mercados que tienen diferencias sustanciales entre sí respecto al marco impositivo que rige para la fabricación (en los casos que aplica), la importación y la comercialización de automotores, en todos los casos esa carga impositiva es menor a la argentina, lo que automáticamente dispara el precio por encima de la media regional.
En general, se dice que la industria automotriz argentina aumenta los autos por debajo de la inflación, o al menos eso sucedió en los años anteriores, cuando el índice de precios, tanto mayorista y minorista, era tan elevado que si se pretendía vender un auto, era imposible trasladar los números del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) a las listas de precios. Sin embargo, este año ambos índices corren en paralelo.
Con una inflación contenida que durante el año osciló entre el 1,6% y el 2,8%, y una cotización del dólar que tuvo dos condiciones diferentes, una hasta antes de abril y otra después de esa fecha en la que el Gobierno levantó el cepo, los precios de los autos nuevos debieron adecuarse a encontrar un equilibrio entre ambas variables y la inevitable convalidación del mercado.

Con los números oficiales publicados este jueves por el Indec, la inflación del mes de noviembre fue del 2,5%, y el acumulado de 2025 entre enero y noviembre alcanzó el 27,9%. En las listas de precios de diciembre, el promedio de aumentos de los autos fue menor a la inflación, alcanzó el 1,9%. Pero en el acumulado fue mayor.
Si bien las nóminas de valores de las automotrices se publican entre el primero y aproximadamente el séptimo día de cada mes, este año hubo dos situaciones que alteraron el escenario y pueden haber tenido incidencia en un incremento algo superior al promedio, ya que en enero se eliminó la escala 1 del impuesto interno que impactaba con un 20% en la franja media del mercado, pero en mayo se subieron los precios por la devaluación implícita de la moneda al liberar el cepo cambiario.
Así, computando sólo las marcas que tienen producción automotriz local, comercializan la mayoría de sus modelos en pesos, y excluyendo a Mercedes-Benz –hoy Prestige Auto-, porque vende sólo utilitarios de uso comercial y no particular, la comparación de incrementos de los fabricantes argentinos ofrece un abanico amplio de política comercial, ya que los extremos fueron de 18% y 39% y el promedio de incrementos entre todas las marcas entre enero y diciembre fue del 31,7%.

Cuánto aumentó cada marca
La marca que menos aumentos aplico fue Nissan, que hasta noviembre alcanzó un 2,6% del total del mercado con 14.630 unidades y sus incrementos promedio fueron del 18,8%, que incluyen un modelo que bajó de precio, el X-Trail Exclusive un 1,7%; otros que aumentaron mínimamente como el X-Trail ePower subiendo solo el 1,4%, y los modelos que más aumentaron, el Kicks Sense un 27,1%. La pick-up Frontier, el único modelo nacional subió entre un 9,6 y un 20%.
La siguiente marca que registró menores aumentos fue Ford, dueña del 8,5% del mercado, que subió en promedio un 24% en las 12 listas de precios de 2025, con el modelo que más menos subió que fue el Kuga Híbrido un 11% y el que tuvo mayor incremento, la pick-up Maverick XLT en un 35,6%. El vehículo nacional, Ford Ranger, subió entre un 19,5 y un 31,9%.
Ya con incrementos promedio por encima de la inflación acumulada de 2025, está el resto de las automotrices. En tercer lugar aparece Chevrolet, que tuvo un crecimiento importante en 2025 hasta alcanzar el 7,9% del total de ventas de autos 0km, y que aplicó aumentos promedio del 28,1% entre todos sus modelos. El vehículo que menos subió de precio fue la pick-up S10 High Country con un 16,6%; en tanto que el modelo de mayor aumento fue la pick-up Full Size Silverado con un 43,6%. El Chevrolet Tracker, el modelo de producción nacional subió entre un 18,8 a un 31,4% según la versión.

Cuarta entre los que menos aumentaron aparece Renault, que en noviembre alcanzó a vender el 10,2% del total del mercado de autos nuevos, con un aumento promedio del 30,6% en sus precios. El modelo que menos aumentó fue el Renault Kangoo E-Tec (100% eléctrico), con un 21,8%. En tanto que el modelo de mayor incremento fue el sedán nacional Logan con un 35,8%. El Kangoo naftero nacional subió entre un 25,8% y un 29%, y la pick-up Alaskan osciló entre un 29,1 y un 33,9%.
Luego aparece Toyota, la que domina el mercado en volumen de unidades vendidas con un 16,8%, que aplicó un promedio de subas del 33,9%. Aquí hubo una gran diferencia entre los autos importados y los modelos de fabricación local. El modelo que menos aumentó fue el SW4 con un 15,3% para su versión SRX, mientras que el de mayor suba fue Corolla Cross GR-Sport, que alcanzó el 48%. La pick-up Hilux tuvo diversos aumentos que fueron desde el 16,3 hasta el 23,2%.
Stellantis aplicó subas altos a sus tres marcas que comercializaron autos en pesos durante todo el año. La que menos aumentó fue Fiat, que tiene el 13% de participación en el mercado, con un 34,9% entre todos sus modelos. El auto que menos porcentaje de aumento aplicó fue Fiat Abarth Fastback con un 28,2%. En tanto que el de mayor suba fue la versión tope de gama del Fiat Cronos con un 39,4% en 12 meses.

Peugeot, que tiene el 8,7% del mercado, fue la siguiente marca del grupo aplicando alzas promedio del 37,4%. El modelo que menos alteró su precio fue Peugeot 2008 GT T200 con un 31,5%, y el que más subió fue el utilitario Boxer con un 44,3%. El Peugeot 208, de fabricación nacional como el 2008, subió entre un 32,7 y un 33,7%.
Intercalado entre los autos franceses de Stellantis entró Volkswagen, que es la segunda marca en mayor mercado del año con un 16,3%. El promedio de suba de precios en el año fue alto, un 38,5%, considerando que quedó afuera del cómputo el nuevo Tera porque se lanzó recién en agosto, por lo tanto el modelo que menos aumentó fue el SUV Tiguan, que sólo subió un 6,3%, mientras el de mayor suba fue el T-Cross Highline con un 46,4%. Amarok, el único producto nacional subió un 38% uniforme.
Finalmente, Citroën, que subió a una participación del mercado del 4,2%, fue la marca que mayor aumento promedio tuvo, un 39,3%. Si bien podría bajar levemente porque no se contabiliza Basalt, que se empezó a vender en febrero, el resto de la gama se mantuvo y se puede contabilizar. El modelo que menos aumento fue Aircross de 7 asientos con una suba del 33,1%, mientras el de mayor incremento fue el furgón Jumper (similar al Peugeot Boxer), con un 44,2%.