El caso por el asesinato de Kim Gómez, la niña de 7 años que perdió la vida en febrero en el barrio Altos de San Lorenzo, en La Plata, atravesará esta semana un momento clave. Con la reanudación plena de la actividad en los tribunales tras la feria de invierno, se confirmó la fecha de la audiencia en la que se decidirá la elevación a juicio oral para el único imputado: un adolescente de 17 años. La jueza María José Lescano será la encargada de resolver los próximos pasos en la causa judicial.
Según informó el portal 0221, la fiscal Carmen Ibarra, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, sostiene que la investigación reunió pruebas suficientes para respaldar la acusación de homicidio agravado en ocasión de robo, delito que impactó fuertemente en la opinión pública local.
El expediente judicial, que se reactivó tras el receso invernal, incorpora una serie de pruebas que la fiscalía considera “contundentes”. Entre ellas figuran grabaciones de cámaras de seguridad recogidas en diferentes puntos del recorrido del automóvil, peritajes mecánicos, testimonios de testigos presenciales y una declaración clave: la de la madre del acusado, quien lo reconoció como el conductor registrado por las imágenes.
La imputación sostiene que el joven encabezó la huida en un Volkswagen Fox robado, sin detenerse, pese a que Kim quedó atrapada en el vehículo, sujetada accidentalmente por el cinturón de seguridad. La niña fue arrastrada por más de quince cuadras, lo que provocó su fallecimiento antes de recibir asistencia médica.
Tras la solicitud formal de elevación a juicio presentada por la fiscal Ibarra, la jueza Lescano notificó a la defensa del menor, lo que habilita la instancia de audiencia prevista para este miércoles 6 de agosto de forma virtual. Se espera que la Fiscalía y la defensa expongan sus argumentos ante la magistrada, quien deberá definir si la causa avanza o si se ordenan nuevas medidas de prueba.
En esta etapa, la estrategia de la defensa podría centrarse en cuestionar la calificación legal, el desarrollo de la instrucción o la necesidad de incorporar evidencia adicional. Mientras tanto, la presión social y la atención pública se mantienen sobre el expediente, dado el impacto social del caso.
El acusado de 17 años permanece alojado en un centro cerrado de régimen penal juvenil, con prisión preventiva confirmada por instancias anteriores, a la espera de la decisión de la jueza Lescano.
En la causa figura también un segundo adolescente, de 14 años, que por su edad no es punible según la legislación vigente. Este último está sujeto a medidas socioeducativas y su expediente se tramita en forma independiente, sin consecuencias penales, en el Juzgado de Menores.
La muerte de la menor provocó una ola de manifestaciones, marchas y pedidos de justicia en el barrio de Altos de San Lorenzo y en toda La Plata. Vecinos y allegados a la familia impulsaron movilizaciones ante los tribunales, reclamando el avance de la investigación y una resolución ejemplar en la causa.
La madre de Kim, en declaraciones públicas durante una de las concentraciones, remarcó: “No queremos venganza, queremos justicia”, y exigió a las autoridades judiciales que la causa siga su curso “sin demoras”.
Las imágenes de las movilizaciones coparon la cobertura mediática tras el crimen, que se recuerda como uno de los episodios más traumáticos de los últimos años en la región.
El resultado de la audiencia fijada para el 6 de agosto marcará si el caso por la muerte de Kim Gómez pasa a una nueva etapa o si regresa a investigación, en un contexto de fuerte demanda ciudadana por justicia y reparación.