La Cámara Sexta del Crimen de Córdoba condenó a prisión perpetua a Matías Gabriel Palacios y los hermanos Carlos Daniel y Héctor Oscar María Figueroa, tres de los cinco sicarios acusados del salvaje crimen de Daniel Enrique Coria, un hombre de 38 años al que mataron por orden del “capo” de la cárcel de Cruz del Eje, Pablo Mario “Pistola” Silva. Este último también recibió la misma pena en el juicio por ser uno de los autores intelectuales del hecho.
De acuerdo con la investigación, el asesinato fue espeluznante: lo citaron por Facebook con la promesa de un trabajo, lo asesinaron a balazos y luego calcinaron el cuerpo. Mientras el cuerpo ardía en llamas, filmaron la secuencia y le enviaron el video a “Pistola” Silva, jefe del pabellón de la cárcel cordobesa.
El tribunal, compuesto por los jueces Pablo Brandán, Enrique Buteler y Esteban Díaz Reyna, en un juicio por jurados, condenó a los acusados como coautores de homicidio doblemente calificado por precio o promesa remuneratoria y por el concurso premeditado de dos o más personas.
En ese sentido, dispuso que los dos principales cerebros detrás del asesinato, Silva y Palacios, sean trasladados a un establecimiento penitenciario federal adecuado para internos de máxima seguridad, dados sus peligrosos antecedentes y roles en el crimen.
En cuanto a otro de los seis acusados, Michael Joel Figueroa, el jurado popular decidió absolverlo, aunque por orden de la Justicia permanecerá detenido debido a una condena previa dictada en abril del mismo año en relación con otra causa judicial. Martín Ezequiel Silva, hermano de “Pistola”, a quien también imputaron del crimen, tampoco fue condenado.
El asesinato
Coria fue asesinado el 15 de febrero de 2023, cuando bomberos acudieron a un predio en llamas cerca de la ruta nacional 19. Allí, encontraron los restos calcinados de un torso humano entre los escombros. Una investigación liderada por la fiscal Claudia Palacios permitió identificar a la víctima gracias a pruebas de ADN.
Según las pesquisas, Coria fue engañado por Gabriel Palacios, un conocido que le prometió un trabajo. Sin embargo, todo fue una trampa para llevarlo a una emboscada, donde sicarios lo ejecutaron. Los asesinos después trasladaron su cuerpo al descampado para quemarlo, supuestamente bajo la dirección de Silva desde la cárcel.
De acuerdo a la pesquisa, durante varias horas el cuerpo de Coria fue quemado en el descampado mientras los sicarios le iban agregando gomas en desuso y otros elementos para alimentar las llamas.
De acuerdo a la hipótesis de la fiscal Claudia Palacios, el video llegó a manos de Pablo Mario Silva, quien cumple condena en el penal de Cruz del Eje. La sospecha es que la emboscada y el crimen fue realizada a cambio de una fuerte suma de dinero.
A pesar de las evidencias, todos los acusados negaron cualquier implicación en el crimen durante su audiencia inicial. Silva, conocido en la cárcel como el “pluma” de su pabellón, dio detalles sobre su posición carcelaria, pero negó cualquier relación con el crimen.
Por pedido del Ministerio Público Fiscal, se realizó a puertas cerradas y bajo máximas medidas de seguridad. La decisión apuntó a proteger tanto a testigos como a los integrantes del jurado, explicaron fuentes judiciales.