La película Cónclave se convirtió en una de las más vistas durante los últimos días. Tras el fallecimiento del papa Francisco, la producción, que se estrenó en octubre del 2024, volvió a estar en el centro de la escena y muchos se preguntan dónde se puede ver.
Una de las primeras opciones que se suele barajar es Netflix, aunque, en esta ocasión, los usuarios no podrán ver Cónclave en el gigante de la N roja. Al no estar disponible, otras opciones aparecen sobre la mesa como Flow y Prime Video.
Para ver Cónclave por Flow se deberá pagar un monto de 330 pesos argentinos y la película estará a disposición durante 48 horas. Este servicio se extiende a los países vecinos de Uruguay y Paraguay.
También Prime Video es otra de las posibilidades que tienen a disposición los usuarios. Para ello se deberá contar solamente con la suscripción activa, sin pagar ningún adicional como en Flow.
Por qué se volvió tendencia la película Cónclave
La conmoción y el shock por la muerte del papa Francisco decantó en el resurgimiento de la película Cónclave, la cual se centra en la sucesión papal y sigue el proceso que vive actualmente el Vaticano (desde la ficción, claro está).
Nominada al premio Oscar, Cónclave es una obra de ficción donde se observan los ritos y prácticas que se llevan a cabo para elegir a las nuevas autoridades. Además del proceso de selección, se observan las distintas facciones dentro de la Iglesia Católica que buscan quedarse con el Trono de San Pedro.
Dirigida por Edward Berger y con el guion de Peter Straughan, tiene como protagonistas a Ralph Fiennes, Issabella Rosellini, Carlos Diehz, Sergio Castellito y John Lithgow.
Estrenada en octubre de 2024, la historia se basa en la perspectiva de Thomas Lawrence, interpretado por Ralph Fiennes, quien es el decano encargado de dirigir la elección del nuevo papa.
Mientras se ejecuta un procedimiento formal, una red de maniobras e intereses contrapuestos comienzan a poner en jaque las votaciones. Progresistas, conservadores y tradicionalistas encabezan una disputa por el liderazgo papal, donde las alianzas y traiciones son moneda corriente.
Aunque se trate de una ficción, las internas que suceden en Cónclave no distan de lo que es la realidad y, por ende, el film resulta tan atrapante. Al ser un ambiente hermético, los protagonistas sacan a relucir las alianzas e intereses y la puja por el reinado se convierte en una batalla de egos.