El tránsito en el boulevard San Juan fue parcialmente restablecido tras semanas de corte total

La Municipalidad de Córdoba habilitó este martes, a partir de las 17, el tránsito vehicular en la mano norte del boulevard San Juan, entre las calles Arturo M. Bas y Corro, en el sector donde ocurrió el derrumbe del pasado 17 de mayo, que provocó la muerte de Ramiro Alaniz Cortés.

La reapertura parcial de la calzada llega luego de que concluyeran las tareas de remoción del revestimiento lateral del edificio María Reina V, desde donde se desprendieron los materiales que cayeron sobre el bar Posto, que también dejó varios heridos.

La medida, que permite la circulación en sentido contrario al centro de la ciudad, fue anunciada tras semanas de corte total en la cuadra, lo que generó efectos directos sobre la dinámica cotidiana del barrio y, sobre todo, sobre la actividad comercial.

Aunque se trata de un avance, los comerciantes del sector continúan expresando su malestar. “Han bajado entre un 50% y un 60%”, afirmaron en diálogo con Noticiero Doce, al ser consultados por el impacto que tuvo la interrupción del tránsito desde la noche de la tragedia.

Comerciantes de la zona aseguran que las ventas cayeron entre un 50 y un 60 por ciento desde el derrumbe

La falta de circulación vehicular, sumada a la clausura de la vereda y a la constante presencia de maquinaria pesada, modificó por completo el movimiento habitual del sector. Según relataron vecinos y comerciantes, la escena se volvió silenciosa, con menos peatones y clientes en los negocios, mientras el ruido de las demoliciones y el polvo en el ambiente se convirtieron en parte del paisaje.

Frente a ese escenario, la habilitación de una de las manos del boulevard representa, al menos para algunos frentistas, un alivio parcial. Sin embargo, aún no hay definiciones sobre cuándo se normalizará por completo el tránsito en la mano sur, la que se dirige hacia el centro. Según consignó El Doce, desde el municipio aseguraron que “todavía no hay precisiones” respecto a esa fecha. Por ahora, el avance de la obra sigue condicionando la circulación en uno de los tramos más transitados de la ciudad.

Mientras tanto, los trabajos continúan. El edificio María Reina V, protagonista del derrumbe que causó una víctima fatal, permanece rodeado por un vallado perimetral y bajo estrictas medidas de seguridad. La empresa Brasca Demoliciones, encargada de la remoción de escombros, sigue adelante con un operativo que combina tareas manuales y maquinaria pesada. El proceso comenzó formalmente el 9 de junio, tras recibir la habilitación oficial para intervenir la estructura.

La demolición avanza ladrillo por ladrillo, en una operación controlada que busca evitar nuevos desprendimientos sorpresivos. No obstante, el pasado jueves por la mañana, un bloque de ladrillos del sector superior del muro del edificio se precipitó dentro del área acordonada, generando un nuevo susto entre vecinos y transeúntes. Si bien no hubo heridos y el episodio fue contenido por el perímetro de seguridad, la situación volvió a exponer la fragilidad del entorno.

La Municipalidad de Córdoba continúa con la demolición del edificio María Reina V en tareas manuales

Desde la empresa a cargo, el arquitecto Diego Mirgone explicó que la caída estaba contemplada en el plan técnico y que fue mejor que ocurriera en esta instancia avanzada del trabajo. “Estaba programado que podía suceder desde el primer día. Sucedió hoy y gracias a Dios, porque si hubiese sido el primer día, eran muchos más metros de pared los que habrían caído”, dijo en diálogo con Canal 10.

El desprendimiento, de unos cinco metros cuadrados y mil kilos de peso, ocurrió durante el quinto día consecutivo de remoción manual. En una primera etapa, los operarios se abocaron a liberar un vehículo que había quedado atrapado frente al bar tras el derrumbe inicial. Luego, las tareas se concentraron en la parte superior e inferior de la fachada lateral del edificio, con el objetivo de desmontar completamente los sectores de ladrillo aún adheridos.

La Fiscalía de Instrucción N.º 10, junto con la Policía Judicial y personal municipal, monitorea de cerca el avance de los trabajos. Parte del material extraído podría ser utilizado como evidencia en la causa judicial que intenta determinar si hubo negligencia en el mantenimiento del inmueble o si existían señales previas de deterioro que no fueron atendidas por la administración del edificio.

A pesar del progreso en la obra, el tránsito peatonal y vehicular en el tramo afectado del boulevard San Juan seguirá restringido, al menos, por otros 20 días. Todo dependerá de las condiciones climáticas y del cumplimiento del cronograma previsto. Por lo pronto, los comerciantes de la zona aguardan con expectativa una solución definitiva, mientras intentan sostener sus ingresos en un contexto adverso.