Una inesperada innovación tecnológica sorprendió a una joven turista en Tokio. Al llegar a un hotel de la capital japonesa, vivió una experiencia que dista mucho de los tradicionales conserjes : en la recepción del establecimiento, los encargados del check in eran robots, diseñados no solo para recibir a los huéspedes, sino también para dirigir y facilitar todo el procedimiento de ingreso. El entorno del hotel, preparado para este tipo de interacción, presentaba un mostrador donde las figuras robóticas dominaban el espacio, desplazándose y comunicándose con los recién llegados.
La imagen de los robots recepcionistas no pasó desapercibida. Alguno de ellos incluso realizaba una reverencia al culminar la atención, mostrando una combinación de sofisticación tecnológica y adaptación a costumbres locales. El ambiente resultó impactante, sobre todo para quienes, como la protagonista del video, no estaban familiarizados con semejante grado de automatización en la hospitalidad internacional. La apuesta de este hotel por sustituir la tradicional atención humana con sistemas robóticos despertó distintas sensaciones, desde la sorpresa inicial hasta el desconcierto.
La experiencia fue registrada y documentada en tiempo real por la propia visitante, en su cuenta de TikTok @manuenalemania. Allí relató cada instante en el video viral que compartió en la plataforma. “Vinimos al hotel de Tokio y esta vez llegamos a hacer el check in y los recepcionistas son robots”, narró, dejando en claro el asombro que sentía junto con quienes la acompañaban en el viaje. Su reacción, una mezcla de incredulidad, fascinación y cierto nerviosismo ante la apariencia de los robots, sumaba un tono espontáneo y auténtico al relato.
Durante el video, la joven exhibió no sentirse completamente segura frente a la situación. Los gestos y comentarios daban cuenta de que enfrentarse a máquinas que simulaban comportarse como personas podía resultar intimidante, especialmente cuando nunca se ha vivido algo similar. Su voz reflejaba desconcierto, y la falta de respuestas claras ante la nueva dinámica acentuaba la autenticidad del registro.
En uno de los tramos más comentados del video, la usuaria mostró paso a paso el procedimiento para completar el check in en el hotel. El trámite comenzó frente a una máquina instalada en el mostrador, desde donde se guiaba al huésped a través de instrucciones automatizadas, reduciendo al máximo la intervención humana en el proceso. Los robots no solo saludaban y daban indicaciones sino que también respondían con agradecimientos, acompañados de una reverencia.
La usuaria registró en su grabación los movimientos exactos de los robots, cómo su diseño mecánico intentaba imitar gestos propios de una persona al interactuar directamente con los visitantes. Este proceso dejó en evidencia no solo el funcionamiento técnico del sistema, sino también el cambio de paradigma que implica encontrarse con autómatas en escenarios tradicionalmente ocupados por personal humano. El video detalla cada paso, desde el primer encuentro hasta la confirmación final del registro en el hotel.
El relato audiovisual tuvo una repercusión notable apenas dos días después de su publicación. Sumó 563 mil reproducciones, acompañado por más de 58 mil “me gusta” y superó los 500 comentarios de espectadores de distintas partes del mundo. En las respuestas del público predominaron tanto bromas como reflexiones acerca del avance de la tecnología y el impacto en el mundo laboral: “Bueno, por lo menos te trataron bien”, ironizaba uno de los usuarios, mientras otros advertían en tono humorístico: “Te matas estudiando administración hotelera para ver cosas como estas” o “los robots pronto nos van a reemplazar”.
El caso se convirtió en un ejemplo viral sobre las nuevas tendencias en hospedaje y la convivencia cada vez más cercana entre humanos y tecnología, un fenómeno que, según reflejan las reacciones, generÓ tantas preguntas como asombros.