Si bien las puertas son la principal barrera de protección de un hogar, en realidad de poco servirían si no tuvieran una buena cerradura, el verdadero escudo ante cualquier intento de intrusión. En otras épocas, la protección de las puertas pasaba por tablones, cerrojos de acero, aldabas, cadenas y llaves cada vez más sofisticadas hasta llegar a las puertas blindadas y otros artilugios modernos que derivaron en las cerraduras inteligentes de la actualidad.

Las cerraduras inteligentes solucionan uno de los grandes problemas de las puertas comunes: al no depender exclusivamente de la llave física, no pueden ser copiadas o clonadas. Pero no solo eso. Ya sea que se trate de una tecnología con conexión Bluetooth, con Wi-Fi, una app, un código a introducir en un teclado digital, la identificación biométrica o una combinación de estas opciones, estos dispositivos son un escollo casi insalvable para quienes quieren entrar con fines delictivos en un hogar, negocio u oficina.

Si bien parecían reservadas para bolsillos privilegiados, las modernas cerraduras inteligentes empiezan a convertirse en algo accesible para cada vez más personas.

Una cerradura inteligente de Ezviz con cámara incorporada para hacer reconocimiento facial

Hay que tener en cuenta que a mayor sofisticación, también lo será el precio; conviene atender a esta relación costo/beneficio especialmente a la hora de pensar en la tranquilidad de tener el acceso al hogar, negocio u oficina protegido.

Queda claro que al incorporar alguna o varias de estas tecnologías, las cerraduras actuales son mucho más que simples sistemas para bloquear o permitir el acceso a una puerta: se transforman en auténticos sistemas de vigilancia. Algunos modelos incluyen cámaras que pueden llegar a detectar movimiento cerca de la puerta y notificarlo al celular, incluso con nítidas imágenes nocturnas.

Además, se conectan con apps y con otros dispositivos hogareños como cámaras de vigilancia, mirillas, timbres, alarmas, asistentes personales (Siri, Alexa, Gemini u otros) y hasta luces. También permiten llevar un control de quién puede entrar y cuándo; así como permiten establecer permisos temporales: algo ideal, por ejemplo, para un alquiler.

Algunas cerraduras, como esta de Gadnic, permiten usar una app, una clave numérica, una huella digital o una llave convencional para abrir la puerta

Otra gran ventaja es que al tener una combinación de llave digital con la física, no solo ya no es tan engorroso el perder u olvidarse las llaves: al poder bloquear la puerta al solicitar una clave numérica, la identificación biométrica (huella digital, reconocimiento facial o por voz) o el ok de una app, la puerta se abrirá solo cuando el propietario así lo desee.

A tener en cuenta: muchas de estas cerraduras funcionan con varias baterías o pilas, aunque su duración estimada es bastante prolongada (varios meses). En muchos casos conviene utilizar las pilas recargables, pero también es posible utilizar un cargador o una batería y conectarlo al puerto USB que traen varios modelos si la energía se agota justo cuando queremos acceder.

Por otro lado, su instalación suele ser algo tan sencillo como sacar la cerradura actual con un destornillador y poner la nueva: solo hay que asegurarse que todo quede donde debe. En los manuales que acompañan a los dispositivos se dan las indicaciones pertinentes y, si alguien no se anima a instalarla por su cuenta, siempre es posible recurrir a un cerrajero.

Algunos modelos actuales

El modelo DL50FVS de la empresa Ezviz incluye un control de ingresos a definir por el usuario, pero también tiene tecnología de reconocimiento facial 3D. Es multifunción, porque además incluye cámara de seguridad y timbre con video.

El monitor color interior se activa antes de que una persona toque el timbre o golpee la puerta. La cámara incorporada muestra quién está del otro lado o permite un vistazo de los alrededores. E incluso si no se está en casa, a través del celular (y de la aplicación nativa Ezviz) es posible verificar la identidad del ocasional visitante.

Por su parte, el modelo DL06 PRO agrega un sensor extra en las manijas para abrir las puertas y se conecta a la red WiFi para otorgar acceso a determinadas personas.

La cerradura NHS-D100 de Nexxt Solutions Home se combina con una app en el celular, con la que se puede bloquear o desbloquear la puerta desde cualquier parte del mundo. Al mismo tiempo, es posible recibir alertas para saber exactamente quién y cuándo entró o salió de la casa.

Entre otras opciones, permite incluso saber si hubo intentos fallidos de contraseña y generar códigos de acceso únicos, que pueden ser temporales, permanentes, especiales o de un solo uso, las cuales se pueden compartir con huéspedes, amistades o familiares.

Una cerradura inteligente de Nexxt con la posibilidad de usar una llave como alternativa a la clave numérica

Esta cerradura se combina con otros equipos del ecosistema Nexxt Home para poder activar luces u otros dispositivos desde la misma app. Utiliza pilas que prometen, según sus creadores, hasta 10 meses de autonomía, aunque trae un puerto USB para poder hacerla funcionar con un cargador o una batería portátil.

Precios y modelos

Acá, una lista con algunos de los modelos de varias marcas que se consiguen en nuestro país:

  • Nictom CS01 (código numérico, apertura por Bluetooth, control desde app móvil): $95.999
  • Gadni Lock08n (Huella digital, código numérico, app por Bluetooth): $136.899
  • Gadnic Pro (Huella, tarjeta RFID, código, llave física, app móvil): $139.499
  • Suono ID‑Pro OLED (pantalla OLED, conexión Wi-Fi, múltiples modos de apertura): $249.999
  • Philips DDL603E‑5HWS Smart 6000 (Conectividad Wi-Fi, huella, código, RFID, integración domótica): $427.000
  • Ezviz DL05 (Huella + RFID + código, conectividad dual, alertas en tiempo real): $235.000
  • Ezviz DL50FVS (Reconocimiento facial 3D, timbre con cámara, batería 5000 mAh): $650.000
  • Ezviz DL06 Pro (Doble huella en ambas manijas, Wi‑Fi, auto-bloqueo, IP65): $495.000
  • Yale YDM3212 (Huella digital, código numérico, llave física): desde $139.900
  • Yale YMF40A (Huella, tarjeta RFID, código, conexión opcional a Hub Wi-Fi/Zigbee): $634.900
  • Yale Assure Z‑Wave YRD256 (teclado táctil, integración con SmartThings/Z-Wave, app móvil): desde $247.900
  • Nexxt Home NHS‑D100 (Wi-Fi, código + app móvil, control desde ecosistema Nexxt): $199.999
  • Cittyo Smart Lock Pro (Huella + Wi-Fi + RFID, control desde celular, cierre automático): desde $180.000