A los 80 años falleció Alejandro Malowicki, uno de los pocos realizadores audiovisuales locales que se especializó en el cine para la infancia. De toda su obra, no demasiado extensa pero reconocida a lo largo de varias décadas aquí y en el exterior, se destaca especialmente la versión cinematográfica en clave de comedia musical de Pinocho, que escribió y dirigió en 1986 con la actuación protagónica de Soledad Silveyra, acompañada por Gianni Lunadei, María Vaner y Cristina Banegas. En esa ocasión, Malowicki hizo suya la adaptación que Hugo Midón hizo del clásico infantil de Carlo Collodi con una mirada argentina del personaje.

La obra más exigente que llevó adelante Malowicki a lo largo de su firme compromiso con el cine para chicos fue Las aventuras de Nahuel (2011), que le exigió más de dos años de preproducción. El protagonista es un chico que sale a buscar a su madre en compañía de un gato bailarín y a lo largo del viaje toma contacto con distintas leyendas relacionadas con la cultura de varios pueblos originarios de la geografía argentina y de sus países limítrofes.

En esa película, el cineasta trabajó con títeres a partir de distintas escuelas, técnicas e influencias que se extendían desde la animación tradicional de varios países del Lejano Oriente hasta las creaciones de Jim Henson. También recurrió al aporte de Roberto Docampo, maestro de titiriteros del Teatro San Martín.

Malowicki contó en ese momento que la película tenía un punto de partida realista en términos escenográficos y visuales, pero que terminaba adoptando una perspectiva inspirada en la serie de Juanito Laguna, creación del pintor Antonio Berni.

Egresado de la Escuela Superior de Bellas Artes de La Plata en 1967, Malowicki concretó en el cine y la actividad audiovisual su temprana vocación de fotógrafo. Sus primeros trabajos se remontan a la década de 1970, cuando fundó la productora que lleva su nombre y se dedicó con bastante repercusión al cine publicitario y documental.

Alejandro Malowicki, en 2004

De a poco empezó a vincularse a las temáticas infantiles desde su trabajo como realizador y también desde la docencia, la investigación y varios espacios institucionales. Llegó a ser presidente de la Sociedad Audiovisual para la Niñez y Adolescencia Argentina, desde la cual expresó en varias ocasiones su preocupación por la desprotección de los niños frente a la pantalla. “Los medios de comunicación no pueden poner como pretexto ningún tipo de cercenamiento a la libertad de expresión cuando se habla de los contenidos que llegan a los niños, deforman su pensamiento y atentan contra su salud”, dijo en 2006.

Con la infancia como tema y el público infantil como destinatario, Malowicki también llevó adelante una amplia creación documental que acompañó los primeros pasos de la televisión por cable y las opciones audiovisuales digitales en la Argentina. Entre ellas se destacan una serie de ocho cortos sobre trasplantes cardio-pediátricos en el Hospital Garrahan, Los cuentos del capitán (80 microprogramas inspirados en relatos clásicos para niños) y un par de adaptaciones a la pantalla chica de las aventuras de la Flaca Escopeta, el popular personaje interpretado por Linda Peretz.

Fuera del cine para chicos, Malowicki dirigió en 2004 Pyme (Sitiados), documental sobre la crisis del sector en los años 90, y Los imprescindibles del rock, una serie de microprogramas emitidos por la señal especializada MuchMusic. El realizador había nacido el 27 de enero de 1944 en la ciudad de Buenos Aires.