Towana Looney se convirtió en la primera persona en vivir más de dos meses con un riñón de cerdo genéticamente modificado, un avance clave en los xenotrasplantes. (Crédito: Ingrassia/Victor Edgardo)

En un avance médico sin precedentes, Towana Looney, una mujer de 53 años originaria de Gadsden, Alabama, se ha convertido en la primera persona en el mundo en vivir con un órgano funcional de cerdo durante más de dos meses. Según informó CBS News, Looney alcanzó este sábado los 61 días con un riñón trasplantado de un cerdo genéticamente modificado, un logro que representa un paso crucial en el desarrollo de los trasplantes de órganos entre especies, conocidos como xenotrasplantes.

“Soy una supermujer”, declaró Looney a la agencia Associated Press, refiriéndose a su recuperación y a la energía que ha experimentado desde la cirugía. La paciente, quien actualmente reside temporalmente en Nueva York para someterse a chequeos médicos, ha sorprendido a su equipo médico con su vitalidad, incluso superando a sus familiares en largas caminatas por la ciudad.

Este éxito no solo marca un hito personal para Looney, sino que también refuerza la esperanza de que los xenotrasplantes puedan convertirse en una solución viable para la escasez de órganos humanos disponibles para trasplantes.

Médicos del NYU Langone Health monitorean la evolución de Looney, cuyo trasplante ha superado todas las expectativas en cuanto a funcionalidad y tolerancia inmunológica. (Crédito: Ingrassia/Victor Edgardo)

Un trasplante sin precedentes liderado por NYU Langone Health

El procedimiento fue realizado por un equipo médico liderado por el Dr. Robert Montgomery en el hospital NYU Langone Health de Nueva York. Según detalló CBS News, Looney es la quinta persona en los Estados Unidos en recibir un órgano de cerdo genéticamente modificado, pero es la primera en lograr que el órgano funcione de manera normal durante un período tan prolongado. “Si la vieras en la calle, no tendrías idea de que lleva un órgano de cerdo funcionando dentro de su cuerpo”, afirmó Montgomery, quien describió la función del riñón como “absolutamente normal”.

El equipo médico ha monitoreado de cerca la evolución de Looney desde la cirugía, realizada el 25 de noviembre de 2024. Aunque en las primeras semanas detectaron señales sutiles de rechazo, lograron tratarlas con éxito, y desde entonces no se han registrado nuevos episodios. Montgomery expresó optimismo sobre el futuro del trasplante, señalando que esperan que Looney pueda regresar a su hogar en Alabama en aproximadamente un mes.

Looney, quien anteriormente pasó ocho años en diálisis, ha experimentado una notable recuperación y continúa sometiéndose a controles médicos en Nueva York. (Crédito: Ingrassia/Victor Edgardo)

La ciencia detrás de los órganos de cerdo genéticamente modificados y su impacto en la escasez de donantes

El uso de órganos de cerdo en trasplantes humanos responde a una necesidad urgente: más de 100.000 personas en los Estados Unidos están en lista de espera para un trasplante, y la mayoría de ellas necesita un riñón. Según CBS News, miles de pacientes mueren cada año debido a la falta de órganos disponibles. Para abordar esta crisis, los científicos han comenzado a modificar genéticamente a los cerdos, alterando sus órganos para que sean más compatibles con el cuerpo humano y reduzcan el riesgo de rechazo.

Hasta ahora, los trasplantes de órganos de cerdo se han realizado bajo el marco de “uso compasivo”, un permiso especial otorgado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) en casos donde los pacientes no tienen otras opciones viables. Sin embargo, los hospitales que han llevado a cabo estos procedimientos están compartiendo información sobre sus resultados para preparar el terreno para estudios formales de xenotrasplantes, que podrían comenzar este mismo año. United Therapeutics, la empresa que suministró el riñón para Looney, ya ha solicitado a la FDA autorización para iniciar ensayos clínicos.

Investigaciones sobre los xenotrasplantes avanzan con la esperanza de que estos procedimientos puedan convertirse en una alternativa viable para miles de pacientes en el futuro. (Imagen ilustrativa Infobae)

El caso de Towana Looney: un desafío inmunológico y una oportunidad para la medicina

La historia de Looney es particularmente notable debido a su compleja situación médica. En 1999, donó uno de sus riñones a su madre, pero complicaciones durante un embarazo posterior le causaron hipertensión arterial, lo que eventualmente dañó su riñón restante. Según CBS News, Looney pasó ocho años en diálisis antes de que los médicos concluyeran que no podría recibir un trasplante de un donante humano debido a los altos niveles de anticuerpos en su organismo, que estaban preparados para atacar cualquier órgano humano trasplantado.

Ante esta situación, Looney decidió participar en el experimento con el riñón de cerdo, a pesar de la incertidumbre sobre cómo su cuerpo reaccionaría al órgano. Fue dada de alta apenas 11 días después de la cirugía, y desde entonces su recuperación ha sido monitoreada mediante análisis de sangre y otras pruebas. Su caso ha proporcionado información valiosa para futuros procedimientos, especialmente en pacientes con sistemas inmunológicos altamente sensibilizados.

El Dr. Robert Montgomery, líder del equipo que realizó el trasplante, calificó el funcionamiento del riñón como

Un avance que inspira a pacientes y científicos en la lucha contra la insuficiencia renal

El éxito de Looney no solo ha sido un logro médico, sino también una fuente de inspiración para otros pacientes que enfrentan largas esperas para un trasplante. Según CBS News, Looney ha recibido mensajes de personas interesadas en los xenotrasplantes, algunas de las cuales están considerando someterse a procedimientos similares. Aunque evita influir directamente en sus decisiones, Looney les aconseja reflexionar y buscar guía espiritual si son religiosos. “Me encanta hablar con la gente y ayudarla”, comentó, expresando su deseo de contribuir al avance de la ciencia y la educación sobre este tema.

Por otro lado, el caso de Looney también ha sido significativo para las familias de donantes que han participado en investigaciones previas. Hace unas semanas, Looney conoció a la familia de un hombre fallecido cuyo cuerpo fue utilizado en un experimento en 2023, en el que un riñón de cerdo funcionó durante 61 días. Mary Miller-Duffy, hermana del donante, expresó su satisfacción al ver cómo la decisión de su familia ha ayudado a avanzar en este campo.

Más de 100.000 personas en los Estados Unidos esperan un trasplante, y los órganos de cerdo podrían ofrecer una solución a la creciente escasez de donantes humanos. (Crédito: Ingrassia/Victor Edgardo)

El futuro de los xenotrasplantes: avances prometedores y desafíos científicos por resolver

Aunque el caso de Looney representa un avance significativo, los médicos reconocen que aún hay muchas incógnitas sobre el futuro de los xenotrasplantes. “La verdad es que no sabemos cuáles serán los próximos obstáculos porque es la primera vez que llegamos tan lejos”, admitió el Dr. Montgomery. Si el riñón de Looney llegara a fallar, ella podría volver a someterse a diálisis, pero su caso ya ha sentado un precedente importante para la medicina.

El éxito de este procedimiento abre la puerta a nuevas posibilidades en el tratamiento de enfermedades renales y otros problemas de salud relacionados con la falta de órganos disponibles. Sin embargo, los expertos subrayan la necesidad de continuar investigando y compartiendo conocimientos para garantizar que los xenotrasplantes sean seguros y efectivos a largo plazo.