¿Qué significa hoy que un celular tenga “buena batería”? Que en circunstancias normales y no tanto llegue la final del día con algo de resto, aun si tenemos un modelo con baterías que se cargan en media hora. Eso significaba, hasta este año, unos 4500 a 5000 mAh de batería. Los mAh son por miliamperio por hora, una forma de medir la capacidad de una batería según la cantidad de energía que puede entregar en una hora (como es fácil de comprobar, los celulares están preparados para reducir al máximo su consumo de electricidad cuando no están en uso activo, lo que extiende su autonomía).

Es un salto bastante grande respecto de los 1500 o 1600 mAh que tenían los primeros smartphones modernos (es decir, post-iPhone de 2007) pero ahora están por dar un salto mayor. ¿Un ejemplo? El Xiaomi 15 Pro, anunciado hace un par de semanas en China, tiene una batería de 6100 mAh, en un dispositivo que en el mismo volumen y un poquito menos de peso que el Galaxy S24 Ultra o el iPhone 16 Pro Max suma una batería con un 20 por ciento de más capacidad. ¿Un montón? Momento, dijo Realme hace diez días: acá está mi Realme GT7 Pro, con 6500 mAh. El tamaño y peso del teléfono (162,5 x 76,9 x 8,6 mm, 222 gramos) es casi idéntico al resto. En ambos casos estamos hablando de dispositivos de primerísimo nivel (con chip Snapdragon 8 Elite, el más poderoso para Android, y todos los chiches).

Un Realme GT7 Pro, con batería de 6500 mAh

No es que no hubiera teléfonos de 6000 mAh: el Moto G24 Power que se vende en la Argentina tiene una batería de 6000 mAh; el Nubia Z60 Ultra que la compañía china venderá en el país también tiene esa capacidad; pero eran más rarezas, equipos inusuales, algo más pesados y voluminosos que los premium estándar, y limitados a los 6000 mAh.

A ese grupo había que sumar al Redmagic 9 Pro (también prometido por Nubia para la Argentina), con una descomunal batería de 6500 mAh…. y ahora fue superado por el Redmagic 10 Pro+, presentado esta semana y que tiene una batería de 7050 mAh. Para darse una idea: el primer iPad de 2010 tenía una batería de 6600 mAh. Es lo más parecido a un teléfono de batería infinita que hay en la actualidad. Pero ¿por qué alguien necesitaría algo así., si ya con los 5000 mAh actuales podemos llegar sin demasiados inconvenientes al final del día? Porque es un teléfono gamer: tiene una gran cámara de vapor y un ventilador interno -como una computadora- para enfriar su interior cuando lo estamos usando para juegos; es una idea similar a la del radiador del auto, con el agua capturando el calor y haciéndolo circular dentro del equipo, y el ventilador retirando el aire caliente del interior.

La enorme batería del Redmagic 10 Pro+; al lado de las cámaras, el ventilador que retira el aire caliente del interior del equipo cuando se usa para videojuegos

Los juegos requieren muchísima potencia del procesador, lo que se traduce en gasto de energía y calor; para asegurar que los usuarios puedan jugar todo lo que quieran sin liquidar la batería es que Nubia puso este combo de batería inmensa y sistema de refrigeración en el equipo, con el bonus de que si no lo usamos para juegos -o no lo hacemos todo el día- la autonomía del teléfono debería ser parecida a la de los celulares de antaño, y contabilizarse en días. Según Nubia puede ofrecer hasta 52 horas de uso, y la recarga de 120 watts asegura que en media hora se puede cargar de nuevo la batería entera.

El resto de las especificaciones del Realme GT7 Pro y del Nubia Redmagic 10 Pro+ son igualmente impactantes: además de la batería de 7050 mAh y el chip Snapdragon 8 Elite, el Redmagic tiene 24 GB de RAM -mucho más que la mayoría de las computadoras de uso diario, sean de escritorio, portátiles o de bolsillo-, 512 GB o 1 TB de almacenamiento, una pantalla Amoled de 6,85″ con tasa de refresco a 144 Hz, una cámara principal y un gran angular de 50 megapíxeles ambos, una cámara frontal invisible (escondida en la pantalla), parlantes estéreo, enchufe para audio analógico, una perilla para activar aplicaciones o cambiar el perfil de uso y los ya clásicos gatillos en el borde del teléfono para usar en videojuegos (el Redmagic 9 Pro también los tiene). No hay noticias todavía sobre su llegada a la Argentina.

El Realme GT7 Pro tiene una pantalla de 6,78 pulgadas con tasa de refresco a 120 Hz y un brillo máximo de 6000 nits (pero no será en toda la pantalla), hasta 16 GB de RAM, hasta 1 TB de almacenamiento acompañando al chip Snapdragon 8 Elite, triple cámara trasera (con lente normal, gran angular y zoom 3x, los tres de 50 megapixeles). La compañía no vende por ahora sus equipos en el país.

¿Por qué importan estos anuncios, entonces? Porque marcan lo que está por venir: equipos que sin modificar su silueta ofrecerán aún mejor autonomía en 2025.