Máxima Zorreguieta y su familia suelen resguardar su vida privada y centrarse en sus deberes dentro de la Casa Real. Sin embargo, en una inusual revelación, la reina compartió una preocupación que atraviesa a su círculo más íntimo: la enfermedad que enfrenta su hija menor, la princesa Ariane. Aunque la joven siempre mantuvo un perfil bajo en comparación con sus hermanas, esta vez su estado de salud cobró protagonismo.

La reina Máxima Zorreguieta participó de una encuentro de UNICEF sobre la relación entre la tecnología y los jóvenes (Foto: Instagram @patrickvkatwijk)

La revelación sobre la salud de la princesa Ariane tuvo lugar durante una conferencia enmarcada en el Día de Internet Segura, un evento organizado por UNICEF Países Bajos, MIND Us y la ciudad de Ámsterdam. Por lo que se dio a conocer, la jornada estuvo centrada en reflexionar sobre el tiempo que niños y jóvenes pasan en Internet y las alertas rojas por el exceso de las redes sociales. En este contexto, Máxima no solo escuchó los testimonios de las nuevas generaciones y sus preocupaciones en la esfera digital, sino que también dejó al descubierto un tema personal que afecta a su familia: la enfermedad que enfrenta su hija menor en relación con esto.

Durante el encuentro, en el que participó junto a otras autoridades, la esposa del rey Guillermo reflexionó sobre el impacto de las pantallas en las nuevas generaciones. Justamente, como madre de tres hijas de entre 17 y 21 años, aseguró estar plenamente consciente del tiempo que los jóvenes pasan frente a ellas y de las consecuencias que esto puede traer. Fue en ese momento cuando desvió la atención hacia su hija menor, Ariane, y, en una confesión inesperada, reveló el problema de salud que la afecta: “Tiene problemas de visión debido al tiempo que pasa frente a la pantalla”.

La reina Máxima aseguró que su hija menor tiene problemas de visión debido al tiempo que pasa frente a la pantalla

Después de dar a conocer este dato, una portavoz del Servicio Nacional de Información brindó más detalles sobre la situación de la princesa Ariane. Según explicó, “la joven enfrenta dificultades para enfocar correctamente”, lo que afecta su visión en distintas actividades diarias. Este problema puede generar fatiga ocular, dolores de cabeza y molestias al leer o utilizar dispositivos electrónicos, lo que llevó a la familia real a prestar especial atención a su salud ocular.

En paralelo, la vida de Ariane Wilhelmina Máxima Inés afronta otros desafíos. Es que alcanzará la mayoría de edad el próximo 10 de abril y marcará un hito en su vida y en la historia de la Casa Real neerlandesa. Como tercera en la línea de sucesión al trono, comparte una curiosa coincidencia con la infanta Sofía de España, quien también cumplirá 18 años ese mismo mes. Además, ambas jóvenes estudian en el UWC Atlantic College, aunque en distintas sedes, con Ariane en la de los Países Bajos y Sofía en la de Gales.

Las princesas Amalia, Ariane y Alexia posaron junto a su madre (Foto: Instagram @koninklijkhuis)

Siguiendo la tradición establecida en 1898, Ariane será nombrada dama de la gran cruz de la Orden del León de los Países Bajos, un reconocimiento que reciben todos los hijos de los jefes de Estado al llegar a la mayoría de edad. Además, obtendrá el título de Dama de la Orden del León de Oro de Nassau y podrá contar con su propio emblema, al igual que sus hermanas. Más allá de esto, fuera del protocolo real, la joven muestra especial interés por el tenis y el hockey, aunque su verdadera pasión es el arte en distintas formas: le encanta cantar, bailar, dibujar y tocar la guitarra.