El K9 fue considerado como un apoyo emocional fundamental para su manejador (FB/Rutland County Sheriff´s Office)

A primera vista, Betcha era un ejemplo de eficiencia como K9 del Departamento del Sheriff del Condado de Rutland, en Vermont.

Este can había sido entrenado para enfrentar con destreza los desafíos más complejos del servicio policial, desde detectar narcóticos hasta realizar operaciones de rastreo. Pero quienes lo conocieron sabían que detrás del arnés y la placa había algo más que un perro policía comprometido con su deber.

Betcha era el confidente silencioso de su manejador, el Subjefe Edward Hunter, un apoyo emocional en una profesión marcada por la presión constante y los riesgos inherentes al cumplimiento de la ley.

El último adiós de Betcha

El K9 estaba especializado en narcóticos, su muerte dejó una profunda impresión en su equipo (FB/Rutland County Sheriff´s Office)

Betcha, un perro policía de apenas dos años de raza Australian Cattle , falleció trágicamente mientras cumplía con su deber en el condado de Rutland, Vermont.

El incidente ocurrió en enero de 2016, cuando, en medio de una operación en la localidad de Danby, Betcha fue atropellado accidentalmente por un vehículo patrulla.

Según un comunicado compartido en la página oficial de Facebook del Departamento del Sheriff del Condado de Rutland, el canino estaba fuera del coche patrulla en el momento del accidente. “Mientras patrullaba en Danby, Betcha estaba fuera del coche y, cuando el ayudante Hunter se adelantó para recogerlo, Betcha corrió delante del coche patrulla y fue golpeado por él”, detalla la publicación.

Este trágico suceso puso fin a la corta pero significativa carrera de Betcha, quien se desempeñaba como un perro especializado en la detección de narcóticos y rastreo.

Más allá de sus funciones policiales, Betcha desempeñaba un papel esencial en la vida personal de su manejador, el Subjefe Edward Hunter. Veterano con 35 años de experiencia, Hunter encontró en Betcha no sólo un compañero de trabajo, sino también un apoyo emocional invaluable.

“Fue mi cuarto compañero de K9, pero puedo decir que mi primer perro fue mi terapia”, declaró Hunter.

“El vínculo entre un manejador de K-9 y el K-9 es algo que los no manejadores no pueden comenzar a entender. Todos amamos a nuestras mascotas, pero un K-9 es un compañero”, agregó el comunicado oficial.

Fuera del uniforme, Betcha era un perro de carácter juguetón y amigable, conocido por sus pasatiempos simples pero llenos de vida. Entre sus actividades favoritas estaba jugar con un frisbee y sacar la cabeza por la ventana del automóvil mientras viajaba, algo que siempre llamaba la atención de quienes lo cruzaban, quienes a menudo se detenían para fotografiarlo.

Su carisma y conexión con las personas iban más allá del ámbito laboral, lo que lo convirtió en un miembro querido tanto dentro como fuera del departamento.

La importancia de los perros policía

Los perros pastor alemán son algunas de las razas más utilizadas para perros policía gracias a su carácter (Imagen Ilustrativa Infobae)

El fallecimiento de Betcha generó una ola de mensajes de condolencias y homenajes en redes sociales, donde colegas, amigos y ciudadanos expresaron su pesar. “Oficial Hunter, como oficial retirado de la ciudad de Nueva York, sé lo que es perder a compañeros. Dios los bendiga y esperen para encontrarse con Betcha en el puente del arco iris”, escribió un usuario.

Otros destacaron el impacto emocional de la pérdida: “Nuestro más sentido pésame por la pérdida de un amigo y socio leal y dedicado”, compartió un seguidor. Betcha será recordado no sólo por su compromiso con la seguridad pública, sino también por la profunda conexión que estableció con quienes lo rodeaban. Su legado como compañero fiel y símbolo de lealtad permanece en los corazones de quienes compartieron su vida.

La participación de los perros K9 en los cuerpos de policía es crucial, ya que desempeñan tareas complejas y altamente especializadas que no todos los caninos pueden realizar, según el American Kennel Club, una organización de registro de perros de raza pura en Estados Unidos.

Entre sus funciones destaca la aprehensión de sospechosos peligrosos, para lo cual estos perros son entrenados para intervenir en situaciones de riesgo, incluso enfrentándose a personas armadas, con el objetivo de proteger a sus compañeros humanos.

Su extraordinario sentido del olfato los convierte en una herramienta esencial para detectar drogas, explosivos y otros elementos vinculados a actividades delictivas. Esta habilidad también los hace indispensables en operativos de seguridad en aeropuertos, fronteras y eventos multitudinarios.

En misiones de búsqueda y rescate, los perros policía sobresalen por su capacidad para localizar personas vivas o restos humanos tras desastres naturales como terremotos, avalanchas o explosiones. Además, son capaces de rastrear grandes extensiones de terreno y, en algunos casos, incluso detectar cuerpos sumergidos en agua.