La televisión encendida, una lista de música o el sonido de un ventilador son los compañeros nocturnos de muchas personas que no pueden dormir en lugares silenciosos. El hábito es muy usual, aunque puede tener causas que ameritan consultas médicas, como ciertas afecciones neurológicas o psicológicas.
Los estudios del sueño y los especialistas en esta disciplina médica se han popularizado en los últimos años. Los hábitos de descanso de las personas influyen en su salud física y mental, tanto como la alimentación o la realización de actividad física. En diálogo con Huff Post, un grupo de expertos plantea que es muy usual que muchas personas necesiten ambientes con sonido para dormir y que en las causas de esa necesidad se pueden encontrar graves afecciones.
Por qué se duerme con ruido
Los especialistas señalan que hay dos clases de ruido que las personas usan para conciliar el sueño. El ruido blanco, que se caracteriza por ser estático, y el ruido marrón, como se describe al compuesto por notas graves. Ambos son muy utilizados por muchas personas para dormir, y aunque no necesariamente eso implique algo malo, las causas merecen atención.
- Ansiedad. Quienes padecen este trastorno, suelen evitar el silencio de manera generalizada y no solo para dormir. En espacios silenciosos, según detallan los especialistas, las personas ansiosas suelen acelerarse y el sonido de fondo funciona como un elemento relajante. “Algunas personas pueden evitar el silencio porque les obliga a tener que sentarse sin interrupciones con su flujo de pensamientos”, describe el Dr. Neal Harish Patel, médico de medicina familiar del Hospital Providence St. Joseph. Cuando los niveles de ansiedad interfieren con la vida cotidiana, es importante consultar a un especialista, advierte.
- Déficit de atención. Muchas personas adultas que padecen TDAH (Trastorno por déficit de atención e hiperactividad) nunca han sido diagnosticadas. La necesidad de rodearse de sonidos para concentrarse en dormir puede ser un síntoma. Si además de este hábito se procrastina invariablemente y se requiere hiperconcentración para realizar cualquier tarea, se debe consultar a un especialista para descartar un diagnóstico de TDAH. “Las personas con TDAH a menudo encuentran que los sonidos constantes les ayudan a concentrarse y relajarse”, detalló Harris.
Otras situaciones que ameritan usar sonidos para dormir
Además de esas dos condiciones que podrían requerir consultar a un especialista, muchas veces las personas duermen con ruido marrón o blanco por factores ambientales o circunstanciales como:
- Vivir en lugares ruidosos. El ruido elegido puede ser un recurso para enmascarar a otros no deseados. Muchas veces si los hogares están en zonas de alto tránsito nocturno, por ejemplo, una lista de música puede bloquear alterarse por los sonidos de los motores o las sirenas de vehículos de emergencia.
- Familiaridad. Quienes se mudan solos luego de haberse criado en una familia numerosa suelen utilizar sonidos para dormir por sentirlos como algo familiar. “Algunas personas simplemente se acostumbran a dormir con ruido porque crecieron en ambientes ruidosos”, dijo Harris.
Finalmente, en el caso de las personas que padecen tinnitus, el especialista explica que el ruido exterior puede ser más confortable que el zumbido que los aqueja por la enfermedad. Al respecto, el Dr. Harris recomienda que en estos casos se mantenga el nivel de ruido en “60 decibeles o menos. Eso es comparable al volumen de una conversación normal o de una oficina de negocios”, concluye.