La NASA compartió esta semana un nuevo informe sobre el meteorito 2024 YR4 que podría cambiar la perspectiva de su posible impacto en la Tierra. Gracias a un reciente análisis, se redujo aún más la probabilidad de una colisión, de un 2,3 por ciento a un 0,001 por ciento.
El asteroide fue descubierto el 27 de diciembre de 2024 bajo el proyecto ATLAS (Asteroid Terrestrial-impact Last Alert System), desde una de las sedes del Minor Planet Center en Chile. En un principio se lo posicionó en el nivel “3″ de la Escala de Riesgo de Turín y en la actualidad su riesgo disminuyó drásticamente.
Según los primeros datos preliminares, se estimó que el 22 de diciembre del 2032 la roca estelar de 40 a 90 metros de diámetro impactaría en alguna región de la superficie terrestre, ya que su órbita se cruzaría con la de nuestro planeta.
En el artículo que compartió la NASA en su sitio web, destacaron que la probabilidad de impacto “seguirá siendo reevaluada” a medida que los astrónomos vigilen su rastro.
En marzo de 2025, el Telescopio Espacial James Webb cambiará su enfoque en dirección al asteroide, debido a que su sistema de sondeo por láser infrarrojo podrá brindar una mayor precisión de su tamaño, velocidad y órbita.
En abril la investigación se verá interrumpida y por unos años el estudio sobre 2024 YR4 se suspenderá. Según informaron desde la agencia estadounidense, su rastro se perderá en el espacio y recién será visible en diciembre del 2028, cuando se aproxime nuevamente a la Tierra y se vuelva lo suficientemente brillante para ser detectado.
Desde la página automatizada Sentry, del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA en el Laboratorio de Propulsión a Chorro, se modificó el riesgo de colisión, por lo que esa noticia envió esperanza a la humanidad de que ninguna región, ciudad o zona geográfica sería afectada por el meteorito.
En un principio, Richard Binzel, que creó la Escala de Turín, reveló que la probabilidad de impacto pasó a ser del 0,005 por ciento. Sin embargo, ahora todo cambió: en los próximos años será de -casi- cero por ciento. “Si bien este asteroide ya no representa un peligro de impacto significativo para la Tierra, 2024 YR4 brindó una oportunidad invaluable para su estudio”, explicó el profesor de Ciencias Planetarias en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
La semana pasada, el científico del organismo espacial estadounidense, David Rankin, advirtió qué parte de la Tierra sufriría las consecuencias de un impacto directo por parte del meteorito. Para ello graficó el “corredor de la muerte”, una serie de países que se ubicarían en la ruta de caída de esta roca estelar.
Según el planteo del científico, algunos de los países que corrían riesgo de ser el blanco de 2024 YR4 eran: India, Venezuela, Pakistán, Ecuador, Bangladesh, Etiopía, Colombia, Sudan y Nigeria. Además, explicó que la velocidad aproximada con la que podría descender sería de 60.000 kilómetros por hora.
Para la suerte de esas regiones, la NASA descartó a caída de la roca estelar y las sociedades de esas naciones pueden dormir tranquilos.
Cabe remarcar que, como lo anunció desde el descubrimiento de 2024 YR4, la información podría cambiar de un momento para otro. Como sucedió con anteriores objetos que parecían estar en dirección hacia la Tierra y que más tarde se desestimaron sus probabilidades de impacto, los científicos destacaron que se podrían modificar algunos datos en cuestión.
Solo queda aguardar a que en 2028 vuelva a pasar, esta vez más cerca de nuestro planeta, para confirmar si realmente es un motivo para asustarse.