Un hombre de 64 años, identificado como Carlos Manuel Cruz Coronel, fue detenido por las autoridades luego de ser acusado de morder y arrancar parte del dedo de un sereno municipal en la ciudad de Trujillo, región La Libertad.
El incidente se registró durante una intervención realizada en la urbanización Sol y Luz, luego de que transeúntes denunciaran al sujeto por hostigamiento en la vía pública.
De acuerdo con testigos, Cruz Coronel habría actuado de forma agresiva y fuera de control, aparentemente bajo los efectos del alcohol, lo que habría dificultado la labor de los agentes municipales. Durante el forcejeo con el personal de Serenazgo, el individuo mordió a uno de los serenos, arrancándole una parte del dedo debido a la fuerza del ataque.
Tras lo sucedido, Cruz Coronel fue reducido y trasladado de inmediato a la comisaría de El Alambre, donde permanece detenido mientras continúan las investigaciones a cargo de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Se espera que en las próximas horas se defina su situación legal, en tanto el Ministerio Público podría formalizar cargos por agresión a la autoridad.
Por su parte, el agente de Serenazgo afectado fue derivado a un centro de salud local, donde recibió atención médica de emergencia para tratar la grave lesión. Según fuentes cercanas, los médicos evalúan las posibilidades de reconstruir el dedo cercenado.
Ataques a agentes municipales
Este tipo de agresiones hacia el personal de Serenazgo y otras fuerzas de seguridad no son casos aislados en el Perú. En los últimos años, las autoridades municipales han denunciado un aumento de ataques físicos durante las intervenciones, especialmente en situaciones vinculadas al consumo de alcohol y otros comportamientos descontrolados en la vía pública.
Por ejemplo, en el año 2023, el Ministerio del Interior reportó más de 1.200 casos de agresiones a miembros de Serenazgo en diversas regiones del país, siendo Lima, Trujillo y Arequipa las ciudades con mayor incidencia.
Estos ataques incluyen desde golpes y amenazas hasta agresiones con armas blancas o situaciones extremas como la registrada en Trujillo.
Falta de respaldo legal
La función del Serenazgo en el Perú, si bien es crucial para garantizar el orden público y la seguridad ciudadana, aún enfrenta desafíos importantes, como la falta de un respaldo legal claro y limitado equipamiento, advierten expertos.
Los agentes de Serenazgo no cuentan con las mismas atribuciones que la PNP y, en muchas ocasiones, realizan intervenciones sin contar con armas de defensa o equipos adecuados.
En este sentido, representantes de asociaciones de Serenazgo han solicitado repetidamente al Congreso y a los gobiernos locales fortalecer las normativas que protejan a los agentes municipales frente a situaciones de riesgo. Además, piden mejoras en su capacitación y en los equipos de protección personal que utilizan para enfrentar incidentes violentos.
Reacciones en La Libertad
El caso ocurrido en Trujillo generó reacciones entre las autoridades locales y ciudadanos de la región La Libertad. Funcionarios municipales condenaron lo sucedido y manifestaron su respaldo al agente herido. Asimismo, hicieron un llamado a las autoridades judiciales para que se sancione con severidad a quienes agreden al personal encargado de velar por la seguridad pública.
Por su parte, algunos residentes de la urbanización Sol y Luz expresaron su preocupación por el incremento de hechos violentos en la zona y solicitaron mayor presencia de Serenazgo y Policía Nacional para prevenir situaciones similares.
Este incidente también ha puesto en evidencia la necesidad de implementar campañas de concienciación dirigidas a la ciudadanía sobre el respeto a las autoridades municipales y la importancia de la convivencia pacífica en los espacios públicos.
Panorama de seguridad
Trujillo, capital de la región La Libertad, es una de las ciudades del norte del Perú que enfrenta serios problemas de inseguridad ciudadana. Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en 2023, el 48 % de los ciudadanos en Trujillo manifestó haber sido víctima de algún delito, mientras que la percepción de inseguridad alcanzó niveles superiores al 80 %.
La situación en esta ciudad ha llevado a las autoridades regionales y municipales a reforzar los patrullajes e intervenciones conjuntas entre Serenazgo y la Policía Nacional. Sin embargo, casos como el ocurrido con Cruz Coronel ponen en evidencia la vulnerabilidad del personal que se encuentra en primera línea para enfrentar situaciones de emergencia.