Los hongos en las uñas son un problema común que afecta a personas de todas las edades. No solo causan molestias, sino que también alteran la apariencia de las uñas: las hacen menos estéticas y saludables. Afortunadamente, la naturaleza brinda soluciones efectivas y un aceite se destaca como un poderoso aliado. Se trata de una alternativa que tiene increíbles propiedades antifúngicas que pueden ayudar a combatir esta afección de manera natural y efectiva, al devolver la salud y el aspecto de las uñas.
Los hongos en las uñas, también conocidos como onicomicosis, son causados por la acumulación de microorganismos, principalmente dermatofitos, que prosperan en ambientes cálidos y húmedos, como aquellos que se generan al usar calzado cerrado por largos períodos o debido a una higiene deficiente. Estos hongos se desarrollan fácilmente cuando los pies se exponen a superficies húmedas, como piletas, gimnasios o duchas públicas, o simplemente por la sudoración prolongada sin un secado adecuado.
Según el sitio Foot & Ankle, las uñas infectadas suelen volverse amarillas, engrosadas y quebradizas, y si no se tratan a tiempo, pueden causar molestias, dolor e incluso la pérdida parcial de la uña. Además, la infección puede propagarse a otras uñas o al tejido circundante, lo que complica aún más el tratamiento.
En este contexto, el aceite de orégano se presenta como una de las soluciones más populares y efectivas para combatir los hongos de las uñas. Este aceite esencial ganó ganado un lugar destacado entre los tratamientos alternativos debido a su capacidad para atacar el problema sin causar efectos secundarios importantes.
El aceite de orégano tiene una serie de beneficios que lo hacen ideal para el tratamiento de los hongos en las uñas. Sus propiedades antifúngicas se deben principalmente al carvacrol y el timol, compuestos que actúan directamente sobre la membrana celular del hongo, que la debilita y evita su reproducción. Estas sustancias no solo inhiben el crecimiento del hongo, sino que también lo eliminan de manera progresiva.
Además de ser antifúngico, el aceite de orégano es antiinflamatorio y analgésico, lo que ayuda a aliviar el enrojecimiento y el dolor causado por la infección. Su potente acción antibacteriana también contribuye a prevenir otras infecciones secundarias que podrían complicar el problema, lo que proporciona una solución integral para la salud de las uñas.
Para usar el aceite de orégano de forma tópica, un sitio especializado recomienda preparar la uña recortarla lo más posible y limpiar la mayor cantidad de hongos. Es importante proteger la piel sana con una loción jabonosa, ya que el aceite de orégano puede causar irritación. Luego, con un hisopo, se debe aplicar el aceite de orégano debajo de la uña donde se encuentra el hongo, dos veces al día.
En algunos casos, puede ser necesario continuar el tratamiento durante varios meses, según la gravedad de la infección. La paciencia y la constancia son claves para lograr buenos resultados, ya que la recuperación de una uña sana es un proceso lento que requiere compromiso. El tratamiento se puede considerar finalizado cuando la uña afectada recupera su color natural, su textura se vuelve más suave y ya no presenta signos visibles de infección. Además, es aconsejable consultar con un especialista o podólogo antes de comenzar cualquier tratamiento para asegurarse de que sea adecuado y recibir una orientación personalizada.
Otros métodos para eliminar los hongos de las uñas
Según el sitio especializado Healthline, existen otros métodos naturales para eliminar los hongos de las uñas:
- Extracto de ageratina: El extracto de ageratina es un antifúngico hecho de plantas de la familia de los girasoles.
- Aceite de árbol de té: El aceite de árbol de té, también llamado melaleuca, es un aceite esencial con propiedades antisépticas y antifúngicas.
- Extracto de hoja de olivo: El extracto de hoja de olivo contiene oleuropeína, una sustancia con propiedades antifúngicas, antimicrobianas y estimulantes del sistema inmunitario.
- Aceite ozonizado: Los aceites ozonizados, como el aceite de oliva y el aceite de girasol, se inyectan con gas ozono, lo que les proporciona propiedades antifúngicas, antimicrobianas y antibacterianas.
- Vinagre: El vinagre es un remedio casero razonablemente seguro con propiedades antifúngicas.
- Ajo: El ajo tiene propiedades antifúngicas y antimicrobianas. Se pueden colocar dientes de ajo picados o machacados en el área afectada durante 30 minutos al día.
- Cambio en la dieta: El vínculo entre la dieta y la salud está más que claro. Mientras más sanos sean los alimentos que se consumen, mayor será la probabilidad de que el cuerpo pueda combatir infecciones como los hongos en las uñas de los pies. Para darle al cuerpo los nutrientes que necesita, se debe incluir: yogur rico en probióticos, suficiente proteína para apoyar el crecimiento de uñas nuevas, hierro para evitar uñas frágiles, ácidos grasos esenciales y alimentos ricos en calcio y vitamina D, como productos lácteos bajos en grasa.