El desayuno es la comida más importante del día, especialmente para los niños. Su incorporación proporciona los nutrientes necesarios para un buen rendimiento físico, intelectual y afrontar las actividades diarias. Además, un desayuno equilibrado no solo ayuda a mejorar la concentración, el estado de ánimo y el metabolismo, sino que también establece hábitos alimenticios saludables a largo plazo.
A continuación, algunos consejos para saber cómo preparar desayunos nutritivos y sanos para los más pequeños.
Cómo hacer desayunos nutritivos y sanos para niños
Para que un desayuno sea nutritivo, completo y equilibrado debe incluir los siguientes grupos de alimentos:
- Proteínas para ayudar el crecimiento y desarrollo: incluir huevos, yogur, queso, leche y frutos secos.
- Carbohidratos complejos que proporcionan energía: sumar avena, cereales sin azúcar y frutas.
- Grasas saludables esenciales para el desarrollo cerebral: incorporar palta, frutos secos, semillas y aceite de oliva.
- Vitaminas y minerales que refuercen el sistema inmunológico: agregar frutas, verduras y lácteos fortificados.
Cuáles son las opciones de desayuno más completas
Existen múltiples opciones saludables, fáciles y rápidas para que los niños disfruten al máximo e ingieran la mayor cantidad de nutrientes posibles.
- Avena con frutas y frutos secos: cocinar avena con leche o bebida vegetal y agregar pedazos de fruta fresca, como banana, frutillas o manzana. Completar con almendras, nueces o semillas de chía para aportar grasas saludables y un toque crujiente.
- Tostadas integrales con aguacate y huevo: untar pan integral con palta y agregar un huevo cocido o revuelto. Esta combinación aporta proteínas, grasas saludables y carbohidratos complejos.
- Batido de yogur con frutas y semillas: mezclar yogur natural con frutas como mango, arándanos o durazno y agregarle semillas de lino o chía. Esta opción es rica en calcio, fibra y antioxidantes.
- Panqueques de avena y plátano: mezclar avena, banana madura y huevo para preparar unos panqueques sin azúcar refinada. Acompañarlos con miel natural y frutas frescas.
- Quesadillas de queso y espinaca: usar tortillas integrales y rellenarlas con queso y espinacas. Se pueden acompañar con una porción de frutas para equilibrar el desayuno.
Consejos para fomentar hábitos saludables en niños
- Involucrar a los más chicos en la preparación: dejar que elijan frutas o decoren su plato.
- Evitar los azúcares refinados y ultra procesados: elegir endulzantes naturales como la miel o la banana.
- Hacer del desayuno un momento agradable: compartir la mesa en familia sin distracciones tecnológicas.
- Variedad y creatividad: cambiar los ingredientes para mantener el interés de los niños.
Errores comunes en el desayuno infantil
Los adultos pueden cometer algunos errores a la hora de pensar el desayuno. Estos pueden comprometer la calidad nutricional del esta comida del arranque del día de los más pequeños. Estos son algunos de los errores más frecuentes:
- Exceso de azúcares refinados: que se encuentra en cereales comerciales, panes blancos y jugos industrializados, estos pueden generar picos de glucosa y disminuir la energía rápidamente.
- Falta de proteínas: un desayuno sin suficiente proteína puede generar hambre poco después de comer.
- Saltearse el desayuno: no desayunar puede afectar el rendimiento escolar y la concentración, además de fomentar el consumo de colaciones poco saludables durante la mañana.