FRANJA DE GAZA.- Tras el asesinato del exlíder de Hamas, Yahya Sinwar, y de bombardear uno de los campos de refugiados más grandes de la Franja de Gaza, el Ejército de Israel volvió a atacar la zona este domingo por la madrugada y provocó la muerte de por lo menos 87 personas, según informó el Ministerio de Salud local.
El ataque aéreo contra la ciudad de Beit Lahiya, al norte de la Franja de Gaza, dejó también más de 40 heridos, entre las que se incluyen mujeres y niños. Por su parte, el ejército israelí dijo que lanzaron un “ataque preciso contra un blanco de Hamas”. Esta cifra de fallecidos representa una de las más elevadas que se registraron en los últimos meses en un solo ataque.
Esto ocurre en el marco de una anunciada intensificación de las ofensivas israelíes contra el grupo militante palestino Hamás y contra Hezbolá -que es apoyado por Irán- en Líbano. La muerte del líder del grupo terrorista generó esperanzas entre los gobiernos de que se abrieran las negociaciones para el tan esperado alto el fuego que ponga fin a más de un año de escalada del conflicto en Medio Oriente. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, declaró a principios de esta semana que los combates continuarían hasta que los rehenes restantes fueran devueltos a casa.
Mientras tanto, desde el sábado por la noche la conectividad a internet estaba interrumpida en el norte de Gaza, lo que dificultó la recopilación de información sobre los ataques.
Sin embargo, se pudo saber que entre los muertos había dos padres y sus cuatro hijos; una mujer, su hijo y su nuera y sus cuatro hijos. Un médico que se encontraba en el lugar, Raheem Kheder, le dijo a AP que el ataque “arrasó un edificio de varios pisos y al menos cuatro casas vecinas”. Por su parte, Mounir al-Bursh, el director general del Ministerio de Salud de Gaza, dijo en la red social X que la avalancha de heridos de los ataques agravó “una situación ya catastrófica para el sistema de salud”.
La cartera de sanidad de Gaza informó que las operaciones de rescate tras el ataque en Beit Lahiya se estaban “viendo obstaculizadas” por “problemas de comunicación y por las operaciones militares israelíes en curso”. Al mismo tiempo de esto, más de cinco mil ciudadanos de la Franja abandonaron Yabalia por las rutas designadas, según informó el portavoz militar israelí, Avichay Adraee.
Desde el momento en que comenzó la ofensiva isralí sobre Gaza el 7 de octubre de 2023, la mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza abandonaron sus hogares, en medio de una pobreza generalizada y la destrucción de hospitales y escuelas.
El ataque en Líbano
Al mismo tiempo, Israel intensificó sus bombardeos sobre el sur de Beirut desde el sábado por la tarde. El ejército libanés dijo que tres de sus soldados murieron en un ataque israelí contra su vehículo en el sur del país este domingo, entre ellos Alhaj Abbas Salameh, una figura de alto rango en el comando sur del grupo.
En respuesta, Israel informó que atacaron el cuartel general de los servicios de inteligencia de Hezbollah en la capital libanesa, así como un taller subterráneo para la fabricación de armas. El primer ministro Netanyahu dijo que este sábado fue objeto de un intento de asesinato por parte de “Hezbollah, apoderado de Irán”, cuando un avión no tripulado se dirigió a las inmediaciones su casa de vacaciones.
También este domingo, las fuerzas de Hezbollah lanzaron 70 cohetes desde Líbano contra el norte de Israel, algunos de los proyectiles fueron interceptados, según anunciaron voceros militares israelíes.
Los conflictos entre Israel y Hezbollah se intensificaron hace un año, cuando el grupo respaldado por Irán empezó a lanzar cohetes en apoyo de Hamas. A principios de octubre de este año, Israel realizó un ataque terrestre dentro de Líbano en un intento de estabilizar la región fronteriza para los ciudadanos que habían huido.
Con información de Reuters y AP