Benito Laren (1962), artista nacido en San Nicolás de los Arroyos, le regaló un cochecito de bebé a Eduardo Costantini por el nacimiento de su hija Kahlo Milagro. “Cuando me enteré que la niña que esperaban se llamaría Khalo Milagro, un nombre tan unido al arte, sentí que tenía que hacer algo especial para ella. Parte de mi obra está ligada al espacio, así que sentí que tenía que hacerle un cochecito con planetas y naves”, expresó Laren.
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Para el obsequio, el excéntrico artista eligió un cochecito de época, que seleccionó por ser más amplio que los modelos actuales. La capota tiene un motivo ligado al espacio, pintado sobre una cuerina a la que también se le bordó el nombre de la niña y el resto fue intervenido con perlas de colores.
En una entrevista a LA NACION, justo antes de inaugurar la muestra El Giocondo en la galería Wircomb, Benito Laren aseguró: “Yo quiero ser famoso a toda costa. Escribiendo, recibí un premio de literatura. Escribo, pinto y canto, hago cualquier cosa con tal de no trabajar. Lo que yo necesito es un mánager, ahora hay unos que empiezan ayer y son refamosos”.
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“Desconozco cuántos cuadros hice, pero hace 36 años que pinto y estimo que produje unas 200 piezas por año. Saquen las cuentas”, dijo a LA NACION el artista bonaerense. “Soy autodidacta y pinto lo que me sale de adentro. Empecé cuando estaba en la primaria. Vi que un compañero hacía historietas, que mi papá pintaba en azulejos y que mi hermano dibujaba y quise copiarlos. Mi hermano tenía más capacidad que yo para el dibujo, por eso trabajo con vidrio, que es como calcar. El vidrio es un soporte ideal para mi obra porque es brilloso y yo me considero un artista marabrilloso”, expresó.
La hija de Elina y Eduardo Costantini nació el 17 de enero. Sus padres expresaron su alegría en un posteo de Instagram: “La felicidad y la emoción indescriptible en el gran día, nació nuestra hija, nuestro sueño; estamos colmados de agradecimiento a la vida. Kahlo, te amamos mucho. Tus papás, Elina y Eduardo”, se lee en la publicación, en la que también le agradecieron al equipo médico del Sanatorio Los Arcos.
Días antes del nacimiento de Kahlo, Costantini fue noticia por haber comprado un campo de 145 hectáreas en Jose Ignacio, Uruguay, que había pertenecido a Lázaro Báez. En diálogo con LA NACION explicó: “Es un terreno con 415 metros de frente y doble salida. Ya funcionaba un club de polo y la idea es redoblar la apuesta”, y detalló que cerró un acuerdo estratégico con el polista Adolfo Cambiaso, a quien conoce desde su infancia. “Soy íntimo amigo de su padre cuando hacía windsurf. Conozco a toda la familia desde hace 30 años”, confesó.
“El cambio y la flexibilización de regulaciones en la inmigración de los caballos convertirá a Uruguay en un centro natural de polo referente en el mundo como sucedió en Palm Beach. Queremos ser parte de ese cambio histórico. Además Punta del Este será un punto clave a nivel internacional por la cantidad de extranjeros que todos los años visitan la ciudad, y para quienes el programa de polo es parte de su agenda central”, expresó el empresario, creador de Nordelta.