Profeco recomendó consumir dulces típicos mexicanos Foto: (Jesús Tovar Sosa/Infobae)

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) resaltó la importancia de consumir productos locales que enriquezcan la cultura gastronómica, como los dulces típicos mexicanos. Estos no solo son una muestra de la riqueza culinaria del país, sino también una conexión con tradiciones prehispánicas y coloniales que han evolucionado para convertirse en íconos de identidad nacional de la República.

Los dulces mexicanos destacan por la mezcla de ingredientes tradicionales utilizados en la gastronomía mexicana, tales como el amaranto, cacao, coco y piloncillo, los cuales son provenientes del campo mexicano. Además de destacar su delicioso sabor, la Profeco destacó que muchos de estos productos tienen valores nutricionales importantes gracias a sus componentes naturales, como el amaranto, que es rico en proteínas y fibra.

Por ello, la institución recomendó optar por estas delicias tradicionales frente a productos ultraprocesados, pues además, aseguró que apoyan a la economía local, promueven la sostenibilidad agrícola y conservan prácticas culinarias ancestrales.

En México existe una gran variedad de dulces tradicionales Foto: (Gobierno de México)

Dulces típicos más representativos de México

México cuenta con una amplia variedad de dulces tradicionales, cada uno con su propia historia y características únicas. Entre los más destacados, según la Profeco, están:

  • Alegrías: Hechas a base de amaranto, miel y a veces frutas secas, son un legado directo de las tradiciones prehispánicas.
  • Cocadas: Dulces elaborados con coco rallado, azúcar y leche, comunes en diversas regiones del país.
  • Muéganos: Originarios de Puebla, están compuestos de pequeñas piezas de masa frita unidas con miel de piloncillo.
  • Palanquetas: Elaboradas con cacahuate o semillas como ajonjolí y unidas con caramelo, son una mezcla crujiente y dulce.
  • Ate: Proveniente de Michoacán, este dulce de membrillo o guayaba es emblemático de la región.
  • Jamoncillo: Tradicional del norte del país, se prepara con leche, azúcar y canela, ofreciendo una textura suave y un sabor dulce y cremoso.
  • Glorias: Originarias de Linares, Nuevo León, están hechas con leche quemada, miel de maíz, vainilla y nuez.
  • Camotes: Dulce característico de Puebla, elaborado con camote, azúcar y esencias que le otorgan diferentes sabores.

El amaranto puede ser un ingrediente bueno para la salud Foto: (Adobe Stock).

Un deleite que conecta con la tradición

Finalmente, la Profeco apuntó que el consumo de dulces típicos no solo permite disfrutar de sabores únicos, sino también preservar la cultura culinaria de México. Al elegir estas delicias, no solo se apoya a los productores locales, sino que se mantiene viva una herencia que ha pasado de generación en generación.

Profeco invitó a los mexicanos a redescubrir y valorar estos productos tradicionales, que son una muestra del ingenio, la creatividad y la diversidad cultural del país.