SAN NICOLÁS.- Para el economista Carlos Melconian, la economía pasó su primer año después de una “herencia muy pesada”. Si bien señaló que la economía argentina sigue atravesando una etapa de ajustes y desafíos, la “deuda” que tiene el Gobierno con el campo con respecto a las retenciones ya puede saldarse, según dijo en Expoagro. El expresidente del Banco Nación coincidió en que, si bien hubo avances en materia fiscal y cambiaria, aún no hay un programa económico integral y definido y, en ese contexto, el sector agropecuario enfrenta un escenario complejo en el que las retenciones siguen siendo un punto crítico.
Fenómeno: un banco reportó en Expoagro que recibió la mitad de la demanda de financiamiento en dólares
“En lo fiscal le fue muy bien [al gobierno]. Hoy se puede discutir quirúrgicamente el tema de retenciones, porque masivamente no van a salir, pero quirúrgicamente no solo se puede confirmar lo que ya se ha dado, sino hasta avanzar. La quita va a ser por producto. La soja va a seguir en capilla. Por ejemplo, si las retenciones son siete billones de pesos, cuatro y pico son soja y del sector primario, porque trigo es nada y maíz es raro”, dijo Melconian en una entrevista con LA NACION tras su disertación.
Resaltó que todavía está faltando un programa integral y global. “Ahora viene el acuerdo con el Fondo Internacional, y el acuerdo con el Fondo es una gran refinanciación, pero le doy mucha menos relevancia al tema de los activos del Banco Central”, indicó. En el Anfiteatro SPS, el economista señaló que hoy el campo puede ir “tranquilamente a pedir por la baja de las retenciones” a los cultivos que todavía pagan la alícuota de los derechos de exportación.
Luego, el economista recordó que la presión que había en la campaña electoral era bajar las retenciones, sin embargo, recién ahora se puede pensar a bajarlas, porque el combo que recibe el campo entre precios, tipo de cambio y retenciones lo afecta. “El productor no ha tirado la toalla porque como lo agarra el año de recuperación del volumen de la sequía, compensa”, precisó.
Melconian apuntó que el Gobierno está emitiendo pesos “a lo loco”, contrario a la versión del equipo económico, que asegura que desde hace siete meses no se emite. “Están emitiendo virtuosamente, no por déficit fiscal, por comprar dólares y porque apareció el crédito, si no no se reactiva la economía. Eso de que está clavada la moneda hace 7 meses, no es cierto, si no el PBI daría -10 y eso no está ocurriendo”, amplió. Afirmó que Milei emite tres veces más de lo que emitía Sergio Massa, cuando era ministro de Economía, pero Massa lo hacía “por el fisco”, mientras que Milei “contrae”.
“Milei emite por razones benignas, pero que no digan que no se emite. Gracias a que esto ocurre, el circulante, los depósitos y créditos que en abril, peor momento de la recesión, empieza a crecer. Si fuera verdad que el Gobierno no emite, ni se hacía hoy Expoagro, no tienen que mentir, no hace falta tener un relato, porque esto es virtuoso. Hay un trabajo formidable en el fisco”, precisó.
Ahora empieza a disminuir la tasa en que se remonetizó la economía y la gente se está quedando con el peso, con respecto de antes que se los sacaba de encima. “Es la antidolarización y, gracias a eso, le empieza a ir bien al programa. Si se sale del programa, le va a ir mal porque está conviviendo la pesificación con la dolarización”, acotó.
Sostuvo que el programa económico de Javier Milei tuvo etapas, periodos, por ejemplo, toda la primera parte del año pasado se acumularon reservas por la calendarización de las importaciones y cobrar las exportaciones, y luego se frenó. “Hoy hay casi equilibrio comercial cambiario, porque están palo a palo las exportaciones e importaciones. Salvó bastante todos los dólares que ingresan del blanqueo, porque ahí entrábamos en un conflicto. Y, no obstante eso, es un programa que no logra salir de reservas negativas, es decir, menos negativa, pero negativa”, precisó.
Señaló que cuando un gobierno decide “perdonar” determinados impuestos, “libera” un conjunto de plata que se “devuelve”.
“Después tenés al que dice: che y falto yo. Ahí tienen que venir los dogmáticos a decir si eran o no competitivos o careros”, afirmó. Sobre las medidas que tiene que tomar el Gobierno aclaró que “se tiene que discutir la política cambiaria”, y afirmó que no habla de devaluación. “Se va a discutir la política. El reto va a ser todo muy lento. Es decir, con el peso que las retenciones tenían, me voy a sentar a discutirlo, ahora que ha perdido peso, es un avance notable. Estamos lejísimos en este país federal de una reforma tributaria. Estoy de acuerdo en discutir las retenciones, y poneme en la mesa Ingresos Brutos también”, observó.
Consultado sobre la decisión del productor, que hoy está apoyando a Javier Milei, dijo: “Quisiera que los afectos sean de verdad. No interesados ni por anti-algo. Y se nota que hay un anti-algo. Es un decir: te quiero a vos porque soy anti esto. Ese fue el resultado de la segunda vuelta. Como yo no tengo doble discurso y no soy careta, el resultado de la segunda vuelta que lleva Milei a la presidencia es sumarle al 30% duro de él, el anti- al otro, que no lo quiero. Así, un país no se va a armar nunca”, observó.
En el Anfiteatro señaló que, si bien entiende que hay un cambio de época mundial, no entiende a Donald Trump, porque está en la vereda de enfrente de Javier Milei en lo que está haciendo. “Hay un cambio de época criollo que lo interpretó Milei y está trabajando en un cambio cultural, donde lo más importante de todo es que hoy nadie quiere déficit fiscal y entendió que la emisión de moneda y el endeudamiento te llevan al desastre, luego ya sabemos cómo va a venir todo”, afirmó.
Especificó que la economía está “desinflacionando”. Agregó que perforar el 2% de la inflación le está costando al Gobierno y simultáneamente quiere reactivar.