El reciente huracán Milton puso a prueba la resistencia de Babcock Ranch, una ciudad de Florida diseñada para ser casi inmune a los destrozos de los fenómenos climáticos extremos. Mientras gran parte del estado se preparaba para el impacto de las fuertes lluvias, esta localidad, con una población de aproximadamente 10.000 personas, se mantuvo firme. A diferencia de otras áreas cercanas que sufrieron grandes daños, esta comunidad no reportó mayores complicaciones.

Cuando el huracán Milton tocó tierra, más de 2000 floridanos buscaron refugio en esta ciudad. Evacuados de Fort Myers, una ciudad costera a solo 24 kilómetros, acudieron en masa a este lugar, que había sido designado como refugio por la División de Gestión de Emergencias de Florida. Dos estructuras de la localidad se transformaron en albergues: una escuela primaria y secundaria, que recibió a unas 400 personas, y un centro deportivo, con capacidad para 1600 más.

El cofundador de Babcock Ranch, Syd Kitson, destacó en una entrevista con The New York Times la seguridad de la ciudad durante este fenómeno. Según explicó, el anuncio del gobernador DeSantis sobre la disponibilidad de refugios en el área llevó a un incremento en la llegada de evacuados. Además, mencionó que varios de los residentes acogieron a otros evacuados en sus propias casas.

“Babcock Ranch salvó muchas vidas en algunas áreas realmente peligrosas. La madre naturaleza siempre va a gobernar. Pero lo que tratamos de hacer es mitigar tanto como sea posible ese riesgo y hacer que nuestra comunidad sea lo más resiliente posible”, destacó.

Dos años antes, en 2022, fue la primera prueba de Babcock Ranch, que logró permanecer casi intacto ante el huracán Ian. Con vientos de hasta 241 kilómetros por hora y lluvias torrenciales, ese fenómeno fue un verdadero desafío para la región. Sin embargo, al igual que con Milton, la ciudad sorteó el temporal sin pérdidas significativas, lo que reforzó su reputación como un modelo de desarrollo urbano diseñado para resistir los efectos de los huracanes. Si bien algunas estructuras y semáforos sufrieron daños menores, la ciudad no perdió el suministro eléctrico en ningún momento.

Cómo es Babcock Ranch, el primer pueblo de Florida construido a prueba de huracanes

Babcock Ranch se extiende por 73 kilómetros cuadrados en el suroeste de Florida, al norte de Fort Myers. Esta ciudad fue inaugurada en 2018 con la misión de resistir los efectos de los huracanes. Entre sus características principales, se destacan sus parques solares, que generan 150 megavatios de energía y están conectados a un sistema de transmisión subterráneo. Esto permite que, incluso durante los peores eventos climáticos, la ciudad rara vez se quede sin electricidad.

El diseño de las calles está orientado a absorber el exceso de lluvia, mientras que los lagos de la zona sirven como estanques de retención para evitar inundaciones. Además, el salón comunitario está reforzado para actuar como refugio durante tormentas. Las estructuras de la ciudad están diseñadas para soportar vientos huracanados de más de 240 kilómetros por hora, lo que añade una capa extra de seguridad.

Otro aspecto clave es que aproximadamente el 90% de la propiedad es un humedal preservado, lo que contribuye a la absorción del agua y previene las anegaciones. A esto se suman diversas instalaciones recreativas, como senderos, campos de golf y piscinas comunitarias, que brindan a los residentes un estilo de vida tranquilo y seguro, en armonía con la naturaleza.