Las cargadas entre hinchadas en el fútbol latinoamericano suelen condimentar los partidos y agregarle color al folclore del deporte, sin embargo, en ocasiones, estas pueden llegar muy lejos y convertirse en algo insólito y hasta de mal gusto. Esto ocurrió en el clásico de San Pablo entre Corinthians y Palmeiras, cuando la afición del timao arrojó al campo de juego la cabeza cercenada de un cerdo. El hecho quedó registrado por las imágenes de la transmisión y enseguida se viralizaron en redes sociales.
El lunes, ambos equipos, rivales de toda la vida, se volvieron a ver las caras por la fecha 32 del Brasilerao. Se trató de un encuentro parejo que se lo terminó llevando por 2-0 Corinthians pese a la gran cantidad de ocasiones de gol creadas por Palmeiras (17 tiros al arco contra seis). Los tantos fueron convertidos por el argentino Rodrigo Garro (41′) y el brasileño Yuri Alberto (56′).
A pesar de la victoria del equipo dirigido por Ramón Díaz, que llegaba dolido por la eliminación a manos de Racing de la Copa Sudamericana y alejado de la zona de descenso que lo preocupó durante buena parte del torneo local, la imagen que trascendió del encuentro fue provocada por su hinchada, la cual consiguió ingresar a las tribunas del Neo Quimica Arena, la cabeza de un chancho para lanzarla en medio del partido.
Si bien hasta el momento no se pudo conocer cómo fue que ingresaron la cabeza del animal, la acción se lee en el contexto del apodo que desde hace varias décadas los hinchas del timao le pusieron a sus rivales del verdao a fines de los años ‘60.
El objeto fue arrojado cuando el partido aun estaba empatado sin goles a los 28 minutos del primer tiempo y durante un córner que iba a lanzar Raphael Veiga. Pese a la intrusión de la cabeza del animal, el árbitro del encuentro, Walter Sampaio, no detuvo el juego, y el delantero Yuri Alberto se acercó a patearlo para sacarlo de la cancha.
Una de las imágenes muestra el momento en el que Alberto intenta sacar la cabeza que finalmente fue apartada por una alcanzapelotas. “Casi me rompo el pie. Pensé que era una almohada, algo así, pero era una cabeza de cerdo, casi me lastimo el pie”, confesó el delantero después del partido, según informó el medio local Globo.
La historia detrás de la cargada
En 1969, la rivalidad paulista comenzaba a cimentarse y terminó de forjarse cuando en la previa dos jugadores de Corinthians murieron durante un accidente vial, en medio del torneo al cual se encaminaba por coronar el timao. La tragedia decantó en una solicitud de parte de la institución para poder incorporar a dos nuevos futbolistas con la intención de completar el plantel. Pero hubo equipo que se negó: Palmeiras.
A raíz del fatal suceso, Corinthians no pudo conseguir el título y la afición se ensañó eternamente con Palmeiras. El presidente del club por aquel entonces Waduih Helu, fue categórico con su crítica hacia el rival con el que comparten ciudad: “Todo el mundo sabe que Palmeiras tiene un espíritu de cerdo”.
Desde ese momento, los seguidores de Corinthinas empezaron a llamar a Palmeiras como “Porco” (cerdo en portugués), apodo que no gustó, de entrada, en los fanáticos del verdao. Sin embargo, con el pasar del tiempo, esto fue cambiando, y en la actualidad los propios hinchas adoptaron el apodo y hasta se incorporó una mascota durante los partidos llamada Gobbato con la apariencia de un cerdo.
El nombre de la mascota no es casualidad, sino que hace referencia a un importante directivo que tuvo el club en la década de 1980, quien fue el encargado de cambiar el marketing de la institución, y tuvo la iniciativa de usar aquel apodo de “porco” a su favor.