El ministro de Economía de Bolivia, Marcelo Montenegro, indicó que su país requiere al menos 2.600. millones de dólares para cubrir la importación de combustible y pagar la cuota de la deuda externa hasta fin de año. La declaración se dio luego de una reunión con la comisión de legisladores para viabilizar la aprobación de algunos créditos externos en la Asamblea Legislativa.
El diputado de oposición Enrique Urquidi -quien es parte de la comisión que está tratando los créditos- explicó a Infobae que el total de los 16 créditos suma cerca de 1.800 millones de dólares, “lo que quiere decir que ni siquiera aprobando todos los créditos se logra tapar ese agujero negro, de 2.600 millones de dólares”.
La comisión conformada entre jefes de bancada, los presidentes de ambas cámaras y los ministros de Economía y Planificación es parte de un acuerdo alcanzando en la cumbre política del 12 junio, en la que se reunieron las cabezas de los poderes públicos y los candidatos a la presidencia, a convocatoria del Tribunal Supremo Electoral, para garantizar las elecciones generales.
Entre los compromisos, se acordó “aprobar las leyes necesarias” para garantizar los recursos económicos para el desarrollo del proceso electoral del 17 de agosto y para el voto en el exterior.
En el encuentro, el presidente Luis Arce manifestó que no habían podido desembolsar el total de los recursos para la votación en el exterior porque los dólares se destinan al pago de la deuda externa y la compra de diésel y gasolina. “No lo hemos podido hacer y no lo vamos a poder hacer porque tenemos una enorme obligación que es la dotación de combustible”, manifestó.
Si bien ninguno de los 16 créditos pendientes de aprobación es de libre disponibilidad ni está relacionado al proceso electoral o la importación de combustible, otorgarían liquidez en dólares y los proyectos locales de inversión pública serían financiados en bolivianos. La ministra de la Presidencia, Maria Nela Prada explicó en marzo que cuando una entidad desembolsa un crédito al país envía dólares al Banco Central de Bolivia (BCB) y esta entidad entrega los fondos en moneda local a la entidad o empresa que vaya a ejecutar un proyecto.
En ese marco, este miércoles los legisladores tratarán la aprobación de dos créditos. Uno es el préstamo por 50 millones del dólares del Fondo Financiero para el Desarrollo de la Cuenca de Plata (Fonplata) para infraestructura de espacios deportivos en Unidades Educativas de Bolivia. El segundo, de 110 millones de dólares, es otorgado por la Corporación Andina de Fomento (CAF) para el Programa Nacional de Puentes Para el Desarrollo.
La aprobación del financiamiento externo es una larga demanda de la administración de Arce que calificó el “bloqueo” de los 16 créditos pendientes como una medida política para perjudicar a su Gobierno, que enfrenta una crisis económica marcada por la falta de dólares tras la debacle de la industria petrolera. En tanto, los legisladores de oposición argumentan su oposición a la aprobación de créditos hasta que el Gobierno no explique el destino del dinero y cómo se han utilizado los préstamos anteriores.
Desde hace más de una década que las reservas internacionales netas del país registran una caída sostenida, debido a una combinación de factores que incluye la caída en los ingresos de la renta petrolera y el aumento del gasto público. Las dificultades financieras del país se hicieron evidentes el primer trimestre de 2023 cuando surgió un mercado paralelo de dólares ante la escasez de la divisa y el aumento de restricciones bancarias en esa moneda. Desde entonces Bolivia sufrió un incremento sostenido de los precios de la canasta familiar y periodos de desabastecimiento de combustible que generan filas de varias horas en las estaciones de servicio y perjudica sectores clave para la economía, como la agricultura y el transporte.