Los minutos previos a la sentencia contra Leonardo Cositorto por liderar la megaestafa de Generación Zoe transcurrieron en un clima de máxima tensión, enojos y gritos entre el imputado y los jueces que integran el Tribunal de Goya, en Corrientes, que este viernes lo declararon culpable de asociación ilícita y reiterados fraudes.

Todo se desató sobre el final de la audiencia, cuando el magistrado Ricardo Carbajal estaba leyendo sus argumentos para condenar al principal acusado de la estafa a 98 ahorristas con su organización. En su alegato, el juez aseguró que Cositorto había vaciado y cerrado las cuentas bancarias de sus víctimas dos meses antes de pagarles lo prometido.

Sus palabras fueron demasiado para los oídos del líder de Generación Zoe, quien insistió con su inocencia hasta el final del juicio y no pudo esconder su enojo al escuchar los dichos de Carabajal en su contra.

Leonardo Cositorto declaró en el primer juicio en su contra

En este contexto, durante toda la intervención del juez, Cositorto renegó en voz alta mientras deslizaba insultos contra él y cuestionaba su decisión. Una situación que el magistrado no soportó y que lo obligó a interrumpir su intervención.

A los gritos, la máxima autoridad del Tribunal señaló con su mano al acusado y le dijo: “Usted está expulsado de la sala de audiencia”. A la custodia policial, le ordenó: “Sáquenlo de acá. Póngale las esposas y sáquenlo de acá”.

Cositorto fue inmediatamente levantado del banco de los acusados, mientras le decía al juez que estaba mintiendo y él continuaba defendiendo su postura.

“Es una vergüenza, están comprados. Corruptos”, dijo el creador de la organización en los pocos metros que caminó hasta la puerta.

Minutos después del escándalo, el juez emitió su veredicto y lo declaró culpable de asociación ilícita y estafa. Junto a él, también fueron declarados culpables Miguel Ángel Echegaray, Maximiliano Javier Batista y Lucas Damián Camelino. Por su parte, los hermanos Nicolás Ismael Medina y Javier Sebastián Medina quedaron absueltos.

Leonardo Cositorto en el juicio

La pena de Leonardo Cositorto podría ir de 5 a 10 años de prisión por tratarse de una estafa en continuado. Las autoridades la darán a conocer el martes, para cuando está pautada la audiencia de cesura.

Los alegatos finales

El pasado martes a las 8:30 habían comenzado los alegatos finales del proceso penal que enfrentaban los seis acusados. En este contexto, la Fiscalía, representada por los doctores Rubén Barry y María Eugenia Ballará, había pedido que se declare la responsabilidad penal de Cositorto, principal acusado y cara visible de dicha asociación ilícita, y otros cinco imputados.

En ese contexto, el fiscal Barry destacó la importante cantidad de pruebas expuestas a lo largo del proceso, dando cuenta del respaldo testimonial y documental que se vio durante el juicio, incluso con los testimonios de testigos y damnificados. “Se ha comprobado que; Leonardo Nelson Cositorto, como líder de la organización, y los otros cinco imputados se conformaron una asociación ilícita”, sostuvo el fiscal.

Sobre la participación puntual de Cositorto y Batista en la organización, señaló: “Los organizadores o jefes idearon planificaron la oficina de la ciudad de Goya poniendo en marcha una estafa piramidal a través de herramientas de engaño, indujeron a error a los inversores”. Y agregó que “se presentaron como una academia de coaching financiero, como una empresa de educación, pero esto era una pantalla para traer inversores”.

Por su parte, la fiscal Ballará respaldó los dichos de su colega y enfatizó: “Durante los meses de juicio se logró comprobar que la asociación fue creada para delinquir”.

“Todos sabían cuál era el rol que le cabía a partir de la puesta en funcionamiento de la oficina en la ciudad de Goya”, agregó. Y explicó: “La asociación ilícita se consuma con el solo hecho de formar parte, pero esta asociación ilícita cometió delitos de estafa en manera reiterada, vendiendo la ilusión de que al colocar su dinero tendrían rédito económico”.

Con la presencia de Cositorto en la sala, ambos fiscales concluyeron que “se ha acreditado con el grado de certeza la autoría de cada uno de los imputados como organizadores y como integrantes”, y solicitaron que se declare la responsabilidad de los mismos.