Este martes, un andinista de origen italiano tuvo que ser rescatado de uno de los tres campamentos del cerro Aconcagua, Mendoza, tras sufrir una descompensación producto de la altura en la que se encontraba. El turista paraba en el segundo puesto de descanso, conocido como Nido de Cóndores y ubicado a aproximadamente 5380 metros sobre el nivel del mar, cuando uno de los guías lo encontró dentro de su carpa con síntomas de desorientación temporal y espacial, y baja frecuencia cardíaca.

El personal de la empresa de alta montaña Lanko se comunicó por radio con el Servicio Médico del campamento Confluencia y detalló que la víctima saturaba 84%, su presión era de 17/10 y la frecuencia cardíaca estaba en 24. Además, no podía pararse por sus propios medios.

Tras dar aviso a la Patrulla de Rescate, fue asistido y luego trasladado en helicóptero hasta Horcones, en donde se encuentra el puesto de Guardaparques. Según informó el medio local UNO, de ahí el personal lo llevó de urgencia al hospital de Uspallata -la localidad más cercana-, en donde lo diagnosticaron con un edema cerebral, una afección común al exponer el cuerpo a esas alturas.

Identificado como Marco Martinuzzi, de 48 años, el turista logró ser estabilizado por los médicos del lugar y pasó la noche bajo observación. Aunque cuando ingresó su estado era reservado, el último parte indicó que se encontraba “fuera de riesgo”. El hombre estaba embarcado en la travesía de llegar a la cumbre del cerro, ubicada a 6962 metros sobre el nivel del mar, la más alta de América.

Cinco víctimas en la temporada

Los andinistas cuentan con tres campamentos antes de llegar a la cima del Aconcagua.

Este rescate se dio a poco tiempo del comienzo de la temporada de ascensos, tras meses marcados por varios accidentes similares y personas fallecidas.

Durante la temporada estival 2024 cinco personas que murieron mientras trataban de llegar a la cima. El último de ellos fue en febrero de 2024, un andinista de 39 años oriundo de Eslovaquia, que fue encontrado cerca de la cima del cerro.

Además de los fallecimientos, este año se reportaron 124 los rescates y evacuaciones, en su mayoría con incidentes provocados por el frío extremo y las condiciones meteorológicas adversas. Asimismo, los profesionales advirtieron que en el último tiempo se notó una proliferación de turismo que no está preparado para el andinismo, y que cuenta con una gran falta de aclimatación a la montaña, que podría ser la clave para explicar los accidentes.

La temporada de ascensos tiene una restricción de ingreso a partir del 15 de febrero y fecha de finalización el 1° de marzo, más allá de que el parque permanece abierto hasta el 30 de abril.

Desde 1929 hasta la actualidad, murieron 162 personas en el Aconcagua, lo que representa un promedio de 2 defunciones por año.