El boxeador británico y excampeón mundial de los pesados Tyson Fury, conocido como “Gypsy King” por su origen gitano, anunció nuevamente su retiro del boxeo, un mes después de perder la revancha contra el ucraniano Oleksandr Usyk. El púgil de 36 años comunicó la decisión en un breve video publicado en su cuenta de Instagram el lunes, que incluyó un mensaje críptico.
“Hola a todos, voy a hacer esto breve y conciso. Me gustaría anunciar mi retiro del boxeo”, dijo Fury. Y agregó: “Fue increíble, disfruté cada minuto y voy a terminar con esto: Dick Turpin llevaba una máscara. Dios bendiga a todos, nos vemos al otro lado”.
No quedó claro por qué Fury hizo, en su despedida de los cuadriláteros, referencia a Turpin, un famoso ladrón inglés, salteador de caminos y de caballos del siglo XVIII, y cuyos hechos fueron romantizados después de su ejecución.
Tyson Fury announces his RETIREMENT from boxing 🤯
Some career from the Gypsy King 👏
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— DAZN Boxing (@DAZNBoxing) January 13, 2025
Fury quedó molesto con la decisión unánime al perder ante Usyk en la revancha que se realizó del 21 de diciembre en Arabia Saudí. Sin embargo, Usyk conectó 179 de 423 golpes lanzados (42%), mientras que Fury conectó 144 de sus 509 golpes, apenas un 28% de efectividad. Reconoció haber cometido errores cuando perdió su primer combate en Riad en mayo en decisión dividida.
Usyk venció a Fury por puntos en decisión unánime en el segundo combate entre ambos y de esta manera revalidó sus títulos de la categoría máxima de la Asociación Mundial (AMB), del Consejo Mundial (CMB) y de la Organización Mundial de Boxeo (OMB). Usyk, de 37 años y que ya había vencido a Fury siete meses antes, volvió a celebrar en Riad al superar al británico con parciales de 116-112 según el parecer de los tres jueces del combate celebrado en el Kingdom Arena de Riad. Así, permanece invicto en 23 peleas (ganó 14 por nocaut). En aquella oportunidad, el ucraniano se quedó con la victoria también por puntos, pero en fallo dividido y le quitó el invicto a su rival en 35 peleas como profesional (había ganado 34, 24 por nocaut, y anulado la restante).
No es la primera vez que el británico anuncia su retiro. Ya lo había hecho en 2022, para su cumpleaños número 34, luego de haber vencido a su compatriota Dillian Whyte. Pero volvió a los cuadriláteros seis meses después.
“Si eso es lo que quiere, es fantástico. Hizo todo lo que pudo. Fue, con diferencia, el mejor peso pesado británico de su generación. Sus peleas siempre fueron emocionantes. Ganó mucho dinero y es justo que ahora lo disfrute”, declaró a su vez su expromotor Frank Warren a la cadena británica BBC.
Un campeón legendario
El retiro de Tyson Fury marca el final de una de las carreras más notables en la historia de los peso pesados. Con una trayectoria repleta de hitos, el británico se consagró al destronar a Wladimir Klitschko en 2015, cuando obtuvo los títulos de la AMB, la FIB, la OMB y la IBO, y poniendo fin al reinado del ucraniano en la división.
Tras su victoria sobre Klitschko, Fury enfrentó una de las etapas más difíciles de su vida. Los problemas con el consumo de drogas y alcohol lo alejaron del ring durante tres años. Durante este tiempo, el boxeador experimentó una crisis personal que lo llevó al borde de la muerte. Sin embargo, con una determinación admirable, Fury logró superar sus adicciones, reducir drásticamente su peso y reencontrar su pasión por el boxeo.
Su regreso en 2018 contra Sefer Seferi fue solo el comienzo de una nueva era para el “Gypsy King”. Esa victoria lo encaminó a una de las rivalidades más memorables en la historia del deporte: su trilogía con Deontay Wilder.
El primer enfrentamiento entre Fury y Wilder en 2018 terminó en un emocionante empate, dejando al público ansioso por una revancha. El británico respondió con dos actuaciones magistrales, venciendo al estadounidense por nocaut técnico en 2020 y por nocaut en el undécimo round en 2021. Estas victorias no solo consolidaron su legado, sino que también reafirmaron su posición como uno de los mejores peso pesados de su generación.
Fury se despide del boxeo con un impresionante récord de 34 victorias y solo dos derrotas, ambas a manos de Oleksandr Usyk. A pesar de estos tropiezos, el inglés se retira con un dato notable: nunca fue derrotado por nocaut, toda una rareza en la feroz división de los pesados.