El presidente Donald Trump sigue avivando la tensión con Canadá por los aranceles, que entraron en vigor este martes, y acusó a su par, Justin Trudeau, de no haber hecho suficiente para evitar su imposición.
Según escribió Trump en sus redes sociales, durante una llamada telefónica que tuvo lugar más temprano este miércoles, el mandatario canadiense le preguntó “qué se podría hacer sobre los aranceles”, para revertir su implementación, a lo que respondió tajante que “muchas personas han muerto por el fentanilo que ha cruzado las fronteras de Canadá y México, y nada me ha convencido de que eso se haya detenido”.
A continuación, reconoció que -tal como le indicó Trudeau- “algo ha mejorado” pero, a sus ojos, “eso no es suficiente”.
Por el contrario, Trump acusó a su homólogo de no estar esforzándose por evitar estas tasas ya que esta situación le sirve “para mantenerse en el poder”, luego de que se viera presionado a renunciar el 6 de enero, tras nueve años en el cargo de primer ministro.
“No pudo decirme cuándo se llevarán a cabo las elecciones en Canadá, lo que me hizo preguntarme, ¿qué está pasando aquí? Luego me di cuenta de que (Trudeau) está tratando de usar este tema para mantenerse en el poder. ¡Buena suerte, Justin!“, cerró su mensaje el estadounidense.
La tensión entre Estados Unidos y Canadá, que se había visto relajada parcialmente en las últimas semanas por el trabajo conjunto emprendido entre las partes por detener la migración irregular y el tráfico de fentanilo, se reavivó a comienzos de esta semana cuando, tras la prórroga anunciada a principios de febrero, finalmente entraron en vigor los aranceles.
Según la orden ejecutiva, el gravamen es del 25% para las importaciones desde México y Canadá, y de un 10% adicional a los bienes procedentes de China.
Tal como había adelantado Ottawa, tan pronto comenzó a regir, se implementó una tasa recíproca sobre 30.000 millones de dólares en importaciones del gigante norteamericano, y aún podrían adicionarse a otros 125.000 millones de dólares en productos, de mantenerse la medida en los próximos 21 días.
“Canadá no permitirá que esta decisión injustificada quede sin respuesta. Nuestros aranceles permanecerán en vigor hasta que la acción comercial de Estados Unidos sea revocada y, si los aranceles no cesan, estamos en conversaciones con provincias y territorios para implementar medidas no arancelarias”, declaró Trudeau.
En medio de estos cruces, la víspera, el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, dijo en diálogo con Fox News que la Casa Blanca podría reconsiderar su postura, sugiriendo un posible alivio en algunos sectores, que se acabó confirmando este miércoles.
“El Presidente está a la escucha (…) así que creo que va a encontrar una solución con ellos (Canadá y México). No va a ser una pausa. Va a haber aranceles, vamos a ser claros, pero lo que está pensando (Trump) es en qué sectores del mercado, tal vez, tal vez, considerará aliviarlos”, dijo al respecto, mientras que la Casa Blanca confirmó, horas más tarde, que efectivamente Estados Unidos permitirá una exención de un mes a los aranceles de las importaciones de automóviles procedentes de ambos países vecinos.
El anuncio se hizo luego de que funcionarios estadounidenses se reunieran con los principales fabricantes de Stellantis, Ford y General Motors. “Vamos a dar una exención de un mes a cualquier automóvil que pase por el T-MEC”, apuntó la portavoz presidencial, Karoline Leavitt.