La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, acompañada por el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, en una imagen de archivo. (EFE/ Sergio Pérez).

El Ministerio de Trabajo ha propuesto este miércoles a los agentes sociales una subida del 4,4% en el Salario Mínimo Interprofesional para este 2025. Se trata de un aumento de 50 euros al mes que supondrá llevar esta renta mínima a los 1.184 euros en 14 pagas y que surge de las recomendaciones del Comité de Expertos que asesora al Gobierno. Sin embargo, la gran pregunta de la que todos los beneficiarios estaban pendientes es de si esta subida del SMI iría acompañada de una subida en el salario mínimo exento de tributación.

En este sentido la postura del organismo liderado por Yolanda Díaz es firme: “Creemos que el SMI debe ser el lugar a partir de donde empieza la fiscalidad. Entendemos que, igual que se ha hecho en otras ocasiones, el mínimo exento debe evolucionar de la misma manera que evolucione el SMI” ha afirmado el secretario de Estado de Trabajo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey en su intervención posterior a la primera negociación sobre la subida del SMI, que ha contado con la presencia de los sindicatos mayoritarios y la patronal.

“La justicia fiscal debe ser distributiva, redistributiva y tiene que ser justa. Los que tienen que pagar son los que más ganan y no los que menos lo hacen”, ha añadido.

Pero “la fiscalidad depende de Hacienda”

Sin embargo, Pérez Rey también ha advertido de que su ministerio “no es competente para establecer la fiscalidad de los salarios ni de ningún otro hecho imponible. Esto es competencia exclusiva del ministerio de Hacienda”, por lo que será decisión del equipo de María Jesús Montero establecer si existe o no esa subida.

Y es que, hasta ahora, las personas que percibían este salario no estaban obligadas a pagar IRPF. De hecho, el año pasado, Hacienda elevó el mínimo exento de tributación de 15.000 a 15.876 euros anuales, igualándolo al SMI de 2024. Sin embargo, la semana pasada se informó que su actualización podría no incluir una revisión automática del mínimo exento de tributación, lo que llevaría a que los beneficiarios del SMI tengan que tributar por primera vez.

Los sindicatos exigen al Gobierno que lo aclare antes de continuar con las negociaciones

Los sindicatos UGT y CCOO, por su parte, han exigido al Ministerio de Trabajo que deje claro si la propuesta de subida del SMI que ha hecho va a quedar exenta de tributación.

Según ha explicado tras la reunión de la mesa de diálogo social la secretaria de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Mari Cruz Vicente, la subida planteada (del 4,4%) no garantiza el 60% del salario medio si no se eleva el mínimo exento en la misma medida que el SMI. Por ello, reclaman a Trabajo que lo aclare para poder abordar la negociación.

En la misma línea, el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján, ha considerado “fundamental” saber si la cantidad que se acuerde esté exenta o no de tributación.

El comité de expertos no contempla en sus análisis el incremento del mínimo exento

En el informe de la comisión asesora, hecho público este miércoles, los expertos han puntualizado que las subidas propuestas (de entre el 3,4% y el 4,4%) serían “el aumento necesario en el caso de no actualizarse el umbral de tributación en el IRPF, manteniéndose, por tanto, el nivel actual de 15.876 euros”.

De hecho, en el análisis especifican que “Si se aumentara dicho nivel sería necesario recalcular la retención correspondiente al nuevo mínimo, que, al ser mayor, se traduciría también en un menor crecimiento del SMI bruto, para un mismo SMI neto”.

Cuánto dinero se quedaría Hacienda del SMI

Si el mínimo exento del IRPF no se ajusta, los trabajadores que perciban el SMI podrían verse obligados a tributar, lo que disminuiría su poder adquisitivo pese al aumento nominal de sus salarios. Esta situación iría en contra del propósito fundamental del SMI: garantizar un ingreso mínimo suficiente para cubrir necesidades básicas sin cargas fiscales adicionales.

Por ejemplo, si el SMI se incrementara finalmente hasta los 1.184 euros mensuales, un salario anual con catorce pagas alcanzaría los 16.576 euros, superando en 700 euros el actual umbral exento de tributación. Sobre esta diferencia, los trabajadores del SMI tendrían que afrontar retenciones fiscales que oscilarían entre 230 y 300 euros, lo que equivaldría a más del 40% del incremento total del SMI.