Adrien Brody, izquierda, y Felicity Jones en una escena de 'The Brutalist' (A24 via AP)

Es una de las favoritas de la temporada. Adrien Brody, su protagonista, se alzó hace dos semanas con el Globo de Oro en la categoría de ‘Mejor Actor de Drama’ por su interpretación en el filme. Llega este viernes a la cartelera española. Los alicientes para ver The Brutalist no necesitan enumerarse, pues camina hacia el éxito de cara a la próxima edición de los Oscar. A pocos días de aterrizar en nuestras salas, la cinta dirigida por Brady Corbet se enfrenta a una oleada de críticas por el empleo de la inteligencia artificial en algunos aspectos del filme.

Según ha contado el editor de The Brutalist, León de Plata a ‘Mejor dirección’ en la pasada edición del Festival de Venecia, una herramienta de IA ha permitido al equipo de producción mejorar la autenticidad de algunos diálogos en húngaro y el aspecto de algunos de los edificios que aparecen en el largometraje. En una entrevista con la revista tecnológica Red Shark News, Dávid Jancsó ha dicho que empleó herramientas de IA de Respeecher, una empresa de software ucraniana.

“Mi lengua materna es el húngaro y sé que es uno de los idiomas más difíciles de aprender a pronunciar”, declaró Jancsó a Red Shark. “Es un idioma muy particular. Entrenamos [a Brody y Jones] e hicieron un trabajo fabuloso, pero también queríamos perfeccionarlo para que ni siquiera los locales notaran ninguna diferencia”, admitió. Los dos actores principales grabaron sus voces en el software de IA, mientras que Jancsó también hizo lo propio “para suavizar el dialecto difícil”. “La mayoría de sus diálogos en húngaro tienen una parte de mí”, añadió el editor. “Fuimos muy cuidadosos a la hora de respetar sus interpretaciones. Se trata sobre todo de sustituir letras aquí y allá”.

Esta imagen difundida por A24 muestra a Adrien Brody, izquierda, y Joe Alwyn en una escena de

Respeecher no solo les ayudó a perfilar algunos de los diálogos más complejos, también les permitió completar algunos de los edificios que aparecen en la película. Jancsó reveló que la IA generativa también se utilizó en la secuencia final de The Brutalist para crear una “serie de dibujos arquitectónicos y edificios terminados” con el estilo del personaje de la película, László Tóth (interpretado por Brody). Pese a la explicación del “uso limitado” de la IA en la cinta, las redes sociales han criticado la decisión, sobre todo al tratarse de una cinta que ha sido aclamada, en parte, por su estilo cinematográfico elaborado y minucioso.

¿De qué trata ‘The Brutalist’?

The Brutalist es un drama inmigratorio que habla del fraude del sueño americano. La historia ahonda en 40 años en la vida de László Tóth (Adrien Brody), un arquitecto judío nacido en Hungría que sobrevivió al Holocausto y que, tras el final de la Segunda Guerra Mundial, emigró a Estados Unidos con su mujer, Erzsébet (Felicity Jones). Al principio, László soporta la pobreza y la indignidad, pero pronto consigue un contrato con un misterioso y adinerado cliente, Harrison Lee Van Buren (Guy Pearce), que cambiará el curso de su vida. Mientras László comienza a construir el edificio brutalista de sus sueños, un fatídico incidente hace que todo dé un giro inesperado.

Brody recurrió a su madre, la fotógrafa Sylvia Plachy, para buscar inspiración para su personaje, y afirmó que su László Tóth es un hombre “con el que sentí un parentesco y una comprensión inmediatos”. Plachy “huyó de Hungría en 1956 durante la revolución húngara, fue una refugiada y emigró a Estados Unidos, y al igual que László, empezó de nuevo y persiguió el sueño de ser artista”, contó Brody en la rueda de prensa de The Brutalist en Venecia. “Entiendo mucho las repercusiones de eso en su vida y en su trabajo como artista, lo que creo que es un maravilloso paralelismo con las creaciones de László y cómo evolucionan con la psicología de posguerra”.

La película cuenta en su reparto con Joe Alwyn, Alessandro Nivola, Jonathan Hyde, Isaach De Bankolé, Raffey Cassidy, Stacy Martin, Emma Laird y Peter Polycarpou. Además de dirigir la película, Corbet también ha coescrito el guion junto a su mujer Mona Fastvold (Dobles Parejas). El joven director estadounidense comenzó como actor en el cine independiente americano, participando en películas como el remake de Funny Games, Martha Marcy May Marlene o Simon Killer. Su debut como director llegó en 2015 con La infancia de un líder, una película con la que ganó el premio Luigi De Laurentiis a la mejor ópera prima y el premio Horizontes al mejor director, y posteriormente llegó Vox Lux, de 2018, que compitió por el León de Oro.