Luego de que el pasado martes, el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) Alberto Pérez Dayán, se posicionara contra el proyecto que pretendía invalidar parcialmente la reforma al Poder Judicial, fuertes críticas fueron lanzadas hacia su persona por parte de la oposición.
Pérez Dayán argumentó que aprobar el proyecto propuesto por el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá sería responder a una insensatez (la reforma judicial) con otra insensatez. “Por más que me trate de convencer a mi mismo de lo contrario, resolver en el sentido que propone la propuesta sería, lo digo con todo respeto y exclusivamente en el fuero de mi propia persona, responder a una insensatez que evade irresponsablemente al texto supremo con otra insensatez equivalente, al forzar el ejercicio de una facultad que no me fue conferida en el conocimiento de una acción de inconstitucionalidad”, expuso.
Uno de los analistas que criticaron al ministro fue el periodista Carlos Loret de Mola, por medio de su columna Historias de reportero de este miércoles, titulada El Yunes de la Corte.
En ella, Loret de Mola recuerda que los morenistas, hace poco tiempo, criticaban a Pérez Dayan, pues lo señalaban de estar “enamorado del dinero”, de no tener “empacho” en ostentarse al lado de los oligarcas del país, recibiendo de ellos sus prebendas, como asientos de honor en los grandes eventos, Fórmula uno, partidos de futbol, peleas de box y relojes, y que era un conflicto de interés andante.
Loret asegura en su texto que el ministro nunca ha sido discreto, y por lo mismo, el obradorato no se cansó de exhibirlo en redes sociales.
Recordó que hace un año, el entonces presidente López Obrador se burlaba de la riqueza y relaciones de Pérez Dayán, quien había sido captado en la carrera del Gran Premio de México en la Fórmula 1. “Va a la zona especial, y luego sale ahí hasta con un Rolex, ¿cuánto valen esos Rolex? Dos millones aproximadamente”. Loret recordó que también lo llamó corrupto, le dijo que era fruto de la cultura del influyentismo, y hasta promovió un juicio político en su contra.
Sin embargo, como víctima del Síndrome de Estocolmo, Pérez Dayán ahora es el orgullo el régimen, pues su voto terminó inclinando la balanza para hacer realidad “el sueño autoritario de la dupla López Obrador-Sheinbaum”, y con su voto, la reforma va.
Según Loret de Mola, Pérez Dayan se dobló, así como lo hizo la familia Yunes. “Sus apellidos quedarán inevitablemente entrelazados como los que sucumbieron ante el régimen para entregarle las mayorías que no les dieron las urnas. Uno el Senado, el otro la Suprema Corte. El ministro Pérez Dayán no tiene el expediente público de los Yunes, pero la sensación de traición y debilidad que deja con su voto a favor del gobierno seguramente despertará el apetito de ir ventilando su historial”.
El periodista expone que desde hace varios días, la presidenta Claudia Sheinbaum mostró que algo se traía entre manos, pues en varias conferencias mañaneras pidió esperar el voto de los ministros de la Suprema Corte, antes de emitir un juicio sobre su análisis de la Reforma Judicial. Según Loret de Mola, se veía que ya sabía que uno de los ministros se había “doblado”, y que ya traían los votos para que la corte no pudiera frenar la reforma que ha causado escándalo internacional.
Asegura que la democracia mexicana experimentará un periodo de daño profundo y seremos un régimen autoritario, “de eso no hay duda”. “¿Presidencialista? Quién sabe, porque aún estamos por descubrir hasta dónde manda la presidenta, hasta dónde manda el expresidente y hasta dónde mandan los otros grupos y figuras de Morena en un momento en que todos están embriagados de poder. ¿Llegaremos a ser una dictadura? Estamos por verlo”, concluye la columna.