La NASA ha establecido un acuerdo pionero con la Agencia Espacial del Perú (CONIDA) para el lanzamiento de cohetes sonda desde Punta Lobos, en Pucusana. Este evento marca un punto de inflexión en la cooperación espacial entre ambos países. Según Andina, el acuerdo se cimentó en dos razones principales: la ubicación favorable del Perú en el ecuador magnético y el importante rol del Radio Observatorio de Jicamarca.
“Punta Lobos ofrece una ubicación ideal para estudios sobre fenómenos espaciales debido a su posición en el ecuador magnético de la Tierra”, reportó el medio antes mencionado. Bill Nelson, administrador de la NASA, destacó que Perú es un “lugar de maravillas celestes” por su idónea ubicación para observaciones astronómicas. Este fenómeno geográfico permite estudiar interacciones entre el Sol y el campo magnético terrestre, claves para entender mejor nuestro entorno planetario. De acuerdo con Jorge Samanez de CONIDA, “el ecuador magnético origina una corriente de partículas energéticas, generando ciertas perturbaciones.”
El pasado del lugar también avala su elección. Informes explicaron que Punta Lobos ha facilitado lanzamientos desde 1974, incluidas misiones con la NASA en 1975 y 1983. Además, cuenta con infraestructura que continúa mejorándose, como la fabricación de combustible (propelente) en su laboratorio especializado y nuevas plataformas de lanzamiento. El Comandante Roger Alonso Morales Cabrera agregó que esto ha permitido “preparar el camino para campañas futuras como CIELO 2028″, la cual podría lanzar entre 10 y 14 cohetes sonda.
Un aspecto central de esta colaboración es el impulso a la investigación nacional. Con base en el medio, se planea incluir una carga útil desarrollada completamente en el Perú dentro de uno de los cohetes de la NASA, lo que pondrá a prueba la capacidad científica y tecnológica peruana. Además, la agencia espacial peruana busca involucrar a la comunidad universitaria, con 14 grupos de seis universidades nacionales ya identificados para participar en proyectos espaciales. “Estamos decididos a promover ciencia y tecnología desde la Agencia Espacial del Perú”, subrayó Roberto Melgar Sheen.
El Radio Observatorio de Jicamarca, una instalación clave para la comprensión mundial de la ionósfera ecuatorial, es otra ventaja destacada por Andina. Este observatorio, compuesto por 18,432 antenas dipolo, ofrece una vasta cobertura que permite analizar la ionósfera de 60 a más de 1000 kilómetros de altura, complementando así la información obtenida por los cohetes sonda. Este potente instrumento científico fue la segunda razón que convenció a los científicos de la NASA, añadiendo un valor significativo a la cooperación bilateral.
Para la futura campaña CIELO 2028, la NASA planea traer plataformas de lanzamiento móviles para facilitar el despegue de múltiples cohetes. El Mayor General FAP Roberto Melgar Sheen expresó que esto representará “un desafío y un éxito para la Agencia Espacial del Perú” al permitir una participación más activa de científicos peruanos, quienes también tendrán oportunidad de colaborar en el ensamblaje y procesamiento de datos de los cohetes.
El acuerdo entre la NASA y CONIDA no solo potenciará la infraestructura y capital humano en el Perú, sino que también posicionará al país como un actor emergente clave en la esfera espacial global. Los datos derivados de estas campañas prometen beneficiar tanto a la comunidad científica peruana como internacional en los años venideros.