El policía antidroga César Martín Ponce Ramos fue condenado a cinco años de cárcel por solicitar un soborno de mil soles con el fin de reducir el pesaje de la droga incautada a un detenido en flagrancia. Su intención era invalidar la prueba y acelerar la liberación del arrestado.
El suboficial de tercera de la Policía Nacional del Perú, quien formaba parte del grupo 3 del Área Antidrogas (AREANDRO) del Callao, fue hallado culpable del delito de cohecho pasivo impropio, tras una investigación liderada por la fiscal María Edith Canales Alarcón.
El acusado pidió el soborno a la esposa de un detenido que supuestamente poseía 16 paquetes de marihuana. Sin embargo, la mujer solo logró reunir S/500 y, al sentirse presionada, decidió denunciar el hecho. Esta denuncia permitió a las autoridades descubrir la corrupción y llevar a cabo el juicio, destacando el papel crucial de la denuncia ciudadana en la lucha contra la corrupción en las fuerzas de seguridad.
Detenido alertó a policía corrupto sobre denuncia
Los hechos ocurrieron en marzo de 2019, cuando Frank Pezo fue detenido por presuntamente poseer 16 paquetes de marihuana. En el marco de la investigación, el suboficial encargado del caso solicitó un soborno de S/1.000 a la esposa del detenido, con el objetivo de manipular el pesaje de la droga y acelerar la liberación de Pezo. Sin embargo, la esposa solo pudo reunir S/500 y, antes de entregar el dinero, optó por denunciar al policía ante la Fiscalía.
En la comunicación entre la esposa y Ponce Ramos, este último le indicó que dejara el dinero con su esposo en la carceleta para “arreglarse” con él, lo que finalmente permitió destapar el acto de corrupción.
Policía amenazó a testigo clave
Durante la investigación, el suboficial Ponce Ramos, acompañado de un sujeto desconocido, se habría acercado a Frank Pezo, testigo principal del caso, quien había sido intervenido por el suboficial por portar droga, para amenazarlo.
Durante la investigación, el suboficial Ponce Ramos, acompañado de un sujeto desconocido, se habría acercado a Frank Pezo, testigo principal del caso, para amenazarlo. Según el testimonio de Pezo ante el Poder Judicial, Ponce Ramos le advirtió que, si colaboraba con la investigación o asistía a las citaciones judiciales, su carrera policial se vería perjudicada.
Policías de unidades de investigación operarían con bandas criminales
Un reciente informe de Ojo Público ha revelado una alarmante situación dentro de los Departamentos de Investigación Criminal (Depincri) de la Policía Nacional del Perú (PNP), donde agentes presuntamente vinculados a organizaciones criminales operan en condiciones de precariedad, con presupuestos reducidos. Estos policías, encargados de investigar delitos como extorsiones y homicidios, también deben enfrentarse a bandas criminales en diversas regiones del país.
El informe analizó 141 resoluciones del Tribunal de Disciplina Policial emitidas en 2024 y descubrió que 224 policías fueron investigados por faltas graves, con 14 de ellos procesados por vínculos con bandas criminales. De esos, seis fueron dados de baja y otros siete siguen siendo investigados.
En julio de 2024, el contralor general, Nelson Shack Yalta, presentó los resultados del Índice de Riesgos de Corrupción e Inconducta Funcional (INCO) 2024, donde la PNP de Lima Metropolitana ocupa el primer lugar con un puntaje del 75.7% en riesgo de corrupción e inconducta funcional.
Además, las regiones más afectadas por este fenómeno de corrupción dentro de la policía fueron Lima, La Libertad, Ica, Piura y Ayacucho. La intervención del Ministerio Público ha sido constante, destacando la detención de agentes en 2024, como la captura de diez policías vinculados a la organización criminal ‘Los Arteros del Sur’, acusados de montar operativos falsos y extorsionar a detenidos.