Los pequeños negocios con puerta a la calle en Lima Metropolitana enfrentan pérdidas económicas diarias en su conjunto de casi medio millón de soles diarios debido a la delincuencia, según un reciente estudio de Videnza Instituto.
La investigación reveló que casi ocho de cada diez negocios han sido víctimas de al menos un delito en los últimos dos años, mientras que nueve de cada diez microempresas han tenido que invertir en medidas de seguridad para evitar nuevos ataques.
La inseguridad ya convirtió a los comerciantes en blanco frecuente de robos, estafas y extorsiones. De acuerdo con los datos recopilados, el 63 % de los encuestados considera que la delincuencia es el principal problema que afecta su distrito. En particular, el cobro de cupos y amenazas han generado un impacto económico significativo, con costos que oscilan entre tres mil y siete mil soles por negocio afectado.
Los delitos más frecuentes
Entre los delitos más comunes reportados por los pequeños negocios se encuentran los pagos con billetes falsos (37 %) y las billeteras electrónicas falsas (28 %), seguidos por el robo de celulares (17.1 %) y el hurto de mercadería durante el día (6.9 %). A estos se suman delitos más violentos, como los asaltos con arma de fuego (11.2 %) o arma blanca (5.1 %), además de extorsiones y amenazas (9.2 %).
Frente a esta situación, muchos comerciantes optaron por implementar medidas de seguridad adicionales. El 35.7 % instaló cámaras de vigilancia, el 17.2 % colocó alarmas, el 15.6 % reforzó sus locales con puertas de fierro y el 15.4 % contrató vigilancia privada. Sin embargo, estas acciones les generan costos adicionales para los empresarios, quienes invierten en promedio casi mil soles en los últimos dos años solo en seguridad.
Además de estas inversiones, las estrategias para evitar la delincuencia han afectado las operaciones diarias de los negocios. Un 13.5 % de los comerciantes optó por cerrar más temprano, mientras que el 10.9 % decidió atender a los clientes con las rejas cerradas, lo que limita la interacción y reduce las oportunidades de venta.
Distritos más afectados por la extorsión
La Policía Nacional del Perú (PNP) identificó a los distritos con mayor número de denuncias por extorsión en lo que va del 2024. San Juan de Lurigancho encabeza la lista con 1,163 casos, seguido por el Cercado de Lima (855 casos) y Comas (597 casos). En contraste, los distritos con menor cantidad de denuncias son Pueblo Libre (31 casos), Santa Rosa (18 casos) y Pucusana (17 casos).
No obstante, las autoridades señalaron que las cifras oficiales podrían estar lejos de reflejar la magnitud real del problema. Muchos comerciantes no denuncian los delitos por miedo a represalias, falta de confianza en la Policía Nacional o simplemente porque creen que será una pérdida de tiempo y no conseguirán ningún resultado a favor. La crisis interna que atraviesa la institución del orden, junto con casos en los que las denuncias no reciben el seguimiento adecuado, ha contribuido a esta desconfianza hacia la autoridad.
El impacto de la delincuencia no solo se refleja en pérdidas económicas diarias, sino también en el cierre de negocios. Según el estudio de Videnza Instituto, un 12 % de los pequeños comerciantes tuvo que cerrar su establecimiento debido a la inseguridad, lo que representó una pérdida promedio de S/4,400 por negocio clausurado.
Las cifras evidencian cómo la delincuencia está afectando la sostenibilidad de los pequeños negocios en Lima. Mientras las extorsiones, robos y fraudes continúan en aumento, los comerciantes se ven obligados a destinar parte de sus ingresos a protegerse, afectando su rentabilidad y estabilidad económica. Los expertos, incluso, advierten que esta situación podría empeorar en lo que va del 2025.