Las condiciones climáticas en Áncash vienen desencadenado un evento de alto riesgo en el Parque Nacional Huascarán. Las intensas lluvias registradas la tarde del 3 de marzo, alrededor de las 15:00 horas, provocaron un desprendimiento en el Pico Sur, lo que generó una inundación en el Campamento Control del espacio natural protegido, afectando áreas cercanas y poniendo en riesgo a trabajadores, pobladores y visitantes. La crecida repentina del río en la quebrada Ulta afectó el puente del mismo nombre, parte de la vía de acceso a Punta Olímpica y al pueblo de Chacas, así como los puestos de venta de alimentos en la ruta Carhuaz-Chacas, lo que obligó a las autoridades a emitir alertas de precaución.
Según lo reportado por el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER), “el flujo de agua proveniente desde el Parque Nacional Huascarán causó erosión fluvial, afectando 12 piscigranjas, cuatro puentes vehiculares y negocios de comida; además, una vivienda se encuentra en riesgo de colapso en el sector Congar”, señaló.
Defensa Civil y organismos de emergencia han desplegado operativos de monitoreo y evaluación para determinar la magnitud del daño. En tanto, las autoridades instan a la población a mantenerse informada y evitar transitar por las áreas afectadas.
El desprendimiento del lecho base en el Pico Sur del Huascarán provocó un volumen significativo de agua y escombros, impactando el campamento ubicado en la zona. Según reportes de medios locales, el desvío del curso del río generó un aumento del caudal, lo que eleva el riesgo de inundaciones y deslizamientos adicionales.
Las condiciones climáticas adversas y la acumulación de material en las laderas contribuyó a esta emergencia, que afecta no solo a la infraestructura del parque, sino también a los residentes y visitantes. Las autoridades han señalado que la situación continúa en evaluación y que se recomienda tomar precauciones ante posibles eventos similares en los próximos días.
Las imágenes difundidas muestran el impacto en la infraestructura vial y las dificultades para evacuar a los afectados. La alerta en la quebrada de Ulta sigue vigente, mientras los organismos de emergencia evalúan la magnitud del daño. Asimismo, la vía departamental AN-107, en el tramo Carhuaz – Chacas, sufrió daños a la altura del sector La Pampa, restringiendo el tránsito. Se recomienda a los conductores tomar las precauciones necesarias.
Afectaciones en Choquechaca y otras localidades
En la madrugada del 3 de marzo, las intensas lluvias provocaron deslizamientos y huaicos en la vía vecinal que conecta Acobamba con Quilca, en el centro poblado Los Jardines, distrito de Acobamba, provincia de Sihuas.
Asimismo, el deslizamiento de piedra y lodo causado por el aumento del caudal del río Buín, en el distrito de Shilla, provincia de Caraz, arrastró una gran cantidad de desmonte y material hasta el río Santa, dejando aislados a los moradores del sector Choquechaca. Los afectados han solicitado apoyo urgente para restablecer la conectividad y atender la emergencia. Las lluvias también provocaron el desborde del río, que desciende de las cordilleras Blanca y Negra, agravando la situación en Áncash.
Por otro lado, en la provincia de Ocros, el distrito de San Cristóbal de Raján registró la destrucción de dos viviendas de material rústico. Según el COER, siete personas resultaron damnificadas en el centro poblado de Raján. La municipalidad habilitó refugios para los afectados y gestiona la entrega de ayuda humanitaria.
Pronóstico del Senamhi y medidas de prevención
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) informó que las precipitaciones en la sierra continuarán con intensidad. Según su reporte, la “sierra presenta precipitaciones de hasta fuerte intensidad con descargas eléctricas, especialmente desde Áncash hasta Puno. Se espera que persista durante el día de acuerdo al aviso vigente y se presente lluvia dispersa hacia la costa por la noche”.
Ante este panorama, las autoridades han instado a la población a mantenerse informada y a tomar medidas preventivas. Se recomienda evitar el tránsito en quebradas y zonas de riesgo, así como seguir las alertas emitidas por organismos oficiales. Defensa Civil, en coordinación con el COER, continuará con las evaluaciones en las áreas afectadas para implementar acciones de respuesta inmediata.