June Spencer fue una figura central en la radio británica gracias a su interpretación de personajes complejos y su capacidad para abordar temas sociales relevantes a lo largo de su carrera (BBC)

A los 105 años, June Spencer, la actriz británica que durante más de siete décadas dio vida a Peggy Woolley en el programa de radio The Archers, murió en la madrugada de hoy. Según un comunicado de su familia, Spencer falleció pacíficamente mientras dormía. Sus familiares expresaron un agradecimiento especial al equipo de profesionales de Liberham Lodge, el hogar de cuidado en el que pasó sus últimos años y donde recibió atención cuidadosa y dedicada.

La partida de Spencer marca el final de una era para The Archers, programa que acompañó desde sus inicios en la década de 1950 y que es considerado una de las series radiales más antiguas y emblemáticas del mundo.

El retiro de Spencer, anunciado en 2022 cuando tenía 103 años, había sido una decisión que, según la actriz, intentó tomar en varias ocasiones. Según Telegraph, ella llevaba al menos un año solicitando su retiro, pero los productores resistían la idea, ya que su personaje había alcanzado una relevancia central para la narrativa de The Archers. Al recordar sus inicios en la serie, jamás imaginó que su papel en lo que entonces era un programa experimental sobre la vida rural en Inglaterra, destinado a educar sobre técnicas agrícolas, se convertiría en un fenómeno cultural que atrajo la atención de audiencias y críticos durante más de siete décadas.

El legado de Spencer trascendió las ondas radiales, convirtiéndola en un ícono cultural admirado por generaciones de oyentes en el Reino Unido y reconocida con diversos honores (BBC)

La trayectoria de June Spencer: un pilar de la radio británica

El papel de Peggy Woolley en The Archers fue, en muchos sentidos, una creación personal de Spencer, quien modeló al personaje desde sus primeros episodios. Al inicio de su carrera en la serie, Peggy era conocida como Peggy Archer, y vivía en Ambridge, un ficticio pueblo rural británico. Su personaje comenzó como una joven esposa casada con Jack Archer, quien luchaba con problemas de adicción al juego y al alcohol. La relación complicada y los desafíos que esto conllevó moldearon el carácter de Peggy, quien a lo largo de los años evolucionó hasta convertirse en una de las figuras más tradicionales y respetadas de Ambridge, adoptando una postura conservadora y reservada que la hizo destacarse en el reparto.

A lo largo de su carrera en la serie, Spencer dejó el programa brevemente a mediados de los años 1950, y el papel fue interpretado temporalmente por Thelma Rogers. Sin embargo, a su regreso en la década de 1960, Peggy asumió nuevas facetas, incluida la de administradora de The Bull, el pub local de Ambridge, donde fue testigo y partícipe de varias de las historias más memorables de The Archers, incluyendo un incidente que terminó en un disturbio y por el que su personaje fue acusado de alteración del orden público.

Peggy Woolley y la sensibilidad social en sus tramas

Su papel en la serie le permitió abordar temas sensibles como el Alzheimer y el alcoholismo, contribuyendo a generar empatía y conciencia entre el público británico (BBC)

Uno de los aspectos más destacados en la carrera de June Spencer fue su habilidad para abordar temas de relevancia social a través de su personaje. Quizás el más conmovedor fue el arco narrativo en el que su segundo esposo en la ficción, Jack Woolley, interpretado por Arnold Peters, enfrentaba la enfermedad de Alzheimer. Esta historia fue un desafío emocional para la actriz, ya que su esposo en la vida real, Roger Brocksom, había fallecido en 2001 por la misma enfermedad. La narrativa de la serie, en la que Peggy Woolley cuida y acompaña a su esposo mientras sufre los efectos de la demencia, resonó profundamente entre los oyentes y ayudó a concientizar al público sobre esta condición en una época en la que el Alzheimer aún no era un tema de debate generalizado.

En otro capítulo de su vida personal, que coincidió con una de las tramas de The Archers, el hijo adoptivo de Spencer, David, falleció a causa de problemas relacionados con el alcoholismo, una tragedia que también se reflejó en la vida de Peggy. En la ficción, su primer esposo, Jack Archer, también luchaba contra el alcoholismo, una circunstancia que proporcionó a Spencer la oportunidad de desarrollar un personaje profundamente complejo y con una sensibilidad que traspasó las ondas radiales para llegar a los hogares de millones de británicos.

El impacto de Spencer llegó a las altas esferas, siendo admirada por la realeza británica, lo que refleja su importancia en la cultura popular del país (BBC)

Un ícono cultural para generaciones de oyentes

La popularidad de Peggy Woolley le generó admiradores en las altas esferas. Camila, entonces duquesa de Cornualles y actual reina, fue una gran seguidora de la serie e incluso invitó a la actriz y al elenco de The Archers a Clarence House para una recepción en 2021, cuando el programa cumplió su 70º aniversario. En esa ocasión, Camila describió a Peggy como “un tesoro nacional que ha sido parte de mi vida, y de la de millones de otros, desde que tengo memoria”. Además, la reina habia hecho un cameo en un episodio especial en 2011 para celebrar el 60º aniversario del programa, un gesto que reflejó el impacto que The Archers y Spencer, como Peggy, tuvieron en la cultura británica.

En reconocimiento a su aporte a la cultura y las artes, June Spencer recibió varias distinciones, entre ellas el título de Oficial de la Orden del Imperio Británico (OBE) en 1991 y fue nombrada Comandante del Imperio Británico (CBE) en 2017. En 2010, también se le otorgó la Libertad de la Ciudad de Londres, un honor reservado para figuras destacadas en el ámbito público. Estas condecoraciones reflejan la importancia de su trabajo y el respeto que tanto sus colegas como el público le profesaban.

El retiro y un legado duradero

En 2022, a los 103 años, Spencer decidió finalmente retirarse de la serie, culminando una carrera de más de 70 años en la radio. Debido a su avanzada edad y a las dificultades de viajar a Birmingham para las grabaciones, los productores de The Archers decidieron construir un estudio de grabación en su hogar en Surrey para facilitar su participación en el programa durante sus últimos años en activo. El 31 de julio de ese año se emitió el último episodio con su voz, y el equipo de The Archers organizó una despedida privada para Spencer en reconocimiento a su invaluable contribución. En sus palabras finales sobre la serie, la actriz expresó que consideraba a The Archers como un “robusto árbol” que ayudó a plantar en 1951, y que, como una “rama vieja y débil”, había llegado el momento de retirarse.

En sus últimos años, June Spencer continuó grabando desde un estudio construido especialmente en su hogar, lo que le permitió seguir participando en la radio al superar las limitaciones de movilidad propias de su avanzada edad (BBC)