La compañía alemana de reaseguros Munich Re calcula un beneficio neto preliminar de alrededor de 900 millones de euros en el tercer trimestre, cifra inferior a los 1.419 millones esperados por el consenso de analistas, debido al mayor impacto del gasto en grandes siniestros, incluyendo el huracán ‘Helene’ en Estados Unidos, aunque confía en batir las previsiones del conjunto del año.

La reaseguradora germana, que tiene previsto publicar sus cuentas del tercer trimestre el próximo 7 de noviembre, ha subrayado que el rendimiento operativo «siguió siendo satisfactorio en todas las líneas de negocio», aunque ha reconocido que su resultado se vio afectado por un gasto en catástrofes naturales «superior al promedio» en el reaseguro de daños materiales.

En este sentido, precisó que el huracán ‘Helene’, que causó graves daños en el sureste de Estados Unidos y aproximadamente 500 millones de euros en pérdidas, representó el mayor siniestro individual de Munich Re en el tercer trimestre.

Asimismo, otros tres siniestros en Canadá en conjunto resultaron en unos gastos similares por siniestros, además del impacto de muchas otras catástrofes naturales y pérdidas provocadas por el hombre, incluyendo daños significativos en Europa central y oriental debido a la tormenta Boris y las consiguientes inundaciones, así como en Estados Unidos y el Caribe debido al huracán Beryl.

A pesar de estas circunstancias y de que los gastos por siniestros atribuibles al huracán Milton «probablemente serán significativos», Munich Re espera superar su objetivo de beneficios para todo el año de 5.000 millones de euros, después de haber alcanzado los 4.700 millones en los nueve primeros meses.

Las acciones de Munich Re llegaban a bajar hasta un 3,5% en la Bolsa de Fráncfort tras el aviso de la compañía, aunque en lo que va de año se revalorizan alrededor de un 24%.