La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha dado su visto bueno a la propuesta de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para que el gasto en defensa de los Veintisiete no compute a efectos de las reglas fiscales, a la vista de que Europa vive «momentos extraordinarios» por la invasión rusa de Ucrania.

Von der Leyen reivindicó el lunes en una rueda de prensa en Bruselas «mayor flexibilidad» para que el pacto de estabilidad tenga «más espacio fiscal para aumentar el gasto en Defensa a nivel nacional», en coherencia con los acuerdos de la OTAN para elevarlo al menos hasta el 2% del PIB, y dada la «urgencia» de elevar la magnitud de los fondos públicos que se dedican a inversiones militares.

La ministra de Hacienda ha dado la «bienvenida» a la propuesta de la Comisión Europea, que aunque «a día de hoy no ha tomado forma», le parece positivo que no compute «a efecto de reglas fiscales el gasto en defensa», ya que se podría cumplir los compromisos con la Alianza Atlántica sin disminuir el gasto en otras partidas.

«Justamente serviría para que no compita con otro tipo de políticas que son imprescindibles para la mejoría de los servicios de los ciudadanos, como en desempleo, en vivienda, en todo aquello que nos hace a todos iguales y que evidentemente no puede estar compitiendo con otras políticas que requieran mayores recursos», ha explicado Montero.

Dicho esto, ha opinado que el concepto de defensa «hay que ampliarlo» para incorporar «todas las medidas de seguridad que necesitan las sociedades desarrolladas» que no se reflejan en el PIB pero que también son importantes, como la apuesta por la ciberseguridad o «la amenaza terrorista».

«Siempre hemos dicho y así comprometimos con la OTAN nuestro porcentaje de participación en el PIB a la defensa, pero también haciéndola compatible evidentemente con otro tipo de iniciativas públicas que los servicios tenemos que desarrollar y lo tienen que hacer los gobiernos», ha añadido.

SIGUE PONIENDO LA MANO EN EL FUEGO POR SU DIRECTOR DE GABINETE

En otro orden de cosas, ha defendido a su jefe de Gabinete, Carlos Moreno, un día después de que el instructor del ‘caso Koldo’ en el Tribunal Supremo (TS), Leopoldo Puente, le haya llamado a él y a otras 16 personas a declarar como testigos por esta trama.

Moreno ha sido citado como testigo después de que el presunto conseguidor de la ‘trama Koldo’, el empresario Víctor de Aldama, le mencionara asegurando que le solicitó dinero al exasesor de Transportes Koldo García para ayudar al jefe de Gabinete de Montero con la compra de un piso, después de que le pidiera el favor de aplazar el embargo de una de las compañías del empresario, cuestión que finalmente quedó resuelta.

Preguntada sobre si sigue poniendo la mano en el fuego por su director de Gabinete, la política socialista ha respondido que «absolutamente», alegando que «es un servidor público» y que le merece todo su respeto y apoyo.

«Lo que hemos conocido de él, sin aportar ninguna prueba, es que alguien en sede judicial, viniendo de la cárcel, empieza a poner en marcha un ventilador que no tiene ningún tipo de prueba, que es un bulo, que son mentiras y lo curioso es que ahora tengamos que estar defendiendo a personas honestas porque un presunto delincuente está mencionándola solo», ha criticado Montero.

En este sentido, ha reclamado a De Aldama «pruebas» y que demuestre sus acusaciones, para después asegurar que «este señor no tiene ninguna credibilidad» y que está demostrado que «no tiene ningún cariño» a Hacienda.

Montero ha denunciado que en democracia «no es admisible» que «a raíz de bulos, de mentiras, de declaraciones de un presunto delincuente», que las hizo «justamente viniendo de la cárcel», se enjuicie a personas inocentes, y ha hecho un llamamiento a que «las formaciones democráticas» no den altavoz «a una persona que no aporta ningún tipo de prueba».