El sector cafetero colombiano atraviesa un momento positivo en cuanto a precios, una situación que ha generado discusiones relevantes sobre el futuro del Fondo Nacional del Café y el Fondo de Estabilización de Precios del Café (FEPC).
Durante un evento reciente, Germán Bahamón, gerente general de los Cafeteros, y Ricardo Bonilla —a quien el presidente Gustavo Petro pidió la renuncia como ministro de Hacienda el 4 de diciembre—, abordaron temas clave relacionados con la financiación de estos instrumentos y las cooperativas.
Bonilla destacó que el actual comportamiento favorable del mercado representa una oportunidad para fortalecer el FEPC, una herramienta diseñada para mitigar las fluctuaciones en los precios del grano.
Según el funcionario, es crucial ajustar los mecanismos de financiamiento de este fondo para garantizar su efectividad, tanto en momentos de crisis como en estrategias preventivas.
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“El buen momento que está viviendo el mercado cafetero debe ser aprovechado para financiar el Fondo de Estabilización de Precios del Café, y le propongo al Gerente un cambio en su administración y poder buscar la manera de recaudar mayores recursos”, expuso el titular de la cartera económica.
Bonilla propuso que se modifique el esquema de aportes de los productores al fondo. Actualmente, los caficultores contribuyen con 0,6 centavos de dólar por cada libra de café exportada, pero el ministro sugirió aumentar este monto cuando los precios internacionales superen determinados umbrales. En su intervención, explicó que cuando los precios del café en la Bolsa de Nueva York exceden los 3 dólares por libra, sería razonable que la contribución subiera a 0,7 centavos de dólar. Este incremento permitiría acumular recursos adicionales en los períodos de bonanza, asegurando un respaldo sólido para enfrentar eventuales caídas en los precios.
Por su parte, Germán Bahamón respaldó la necesidad de una gestión más eficiente de los recursos del sector. Señaló que el Fondo Nacional del Café cuenta con un ahorro de 430.000 millones de pesos, una suma que actualmente no es indispensable para atender crisis inmediatas. Además, propuso utilizar estos recursos de manera anticipada en actividades como la lucha contra enfermedades y la fertilización, contribuyendo a mejorar la productividad y la sostenibilidad del sector a largo plazo.
No obstante, Bonilla expresó ciertas reservas respecto al uso preventivo del ahorro existente, argumentando que su impacto en la solución de una crisis significativa sería limitado. Aun así, ambos coincidieron en la importancia de ajustar las políticas de financiamiento del FEPC para aprovechar el buen momento del mercado y consolidar una estructura financiera más resiliente.
La reforma propuesta por Bonilla plantea un enfoque pragmático: aprovechar los períodos de precios altos para robustecer el fondo, garantizando recursos suficientes para proteger a los productores durante las fluctuaciones del mercado. Este planteamiento subraya la necesidad de un modelo de gestión adaptativo que responda tanto a las necesidades inmediatas del sector como a sus desafíos a largo plazo.
La discusión en torno a estas medidas subraya el compromiso de las autoridades y los líderes cafeteros por encontrar soluciones sostenibles que fortalezcan la competitividad del sector en un mercado global cada vez más dinámico.
El café colombiano superó la barrera de los 3 dólares la libra en la bolsa de Nueva York
Este aumento en el valor del café fue reportado por la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), que destaca el impacto positivo en los productores locales.
Según la FNC, el precio de referencia interno para la compra de café pergamino seco de 125 kilogramos se situó en 2.595.000 pesos con corte al jueves 21 de noviembre de 2024, reflejando un aumento respecto al día anterior. Este incremento se suma a una tendencia al alza que se ha mantenido durante el año.
El año 2024 ha sido especialmente favorable para el sector caficultor colombiano, con un aumento del 6% en el valor de la cosecha y un 18% en la producción, a pesar de los desafíos climáticos.
La FNC anticipa que el precio podría seguir fluctuando hacia finales de noviembre, influenciado por las condiciones climáticas que afectan las cosechas.
En el mercado internacional, el precio del café también subió, alcanzando los USD 295,70 por libra en la Bolsa de Nueva York. Con una tasa de cambio de 4.394.80 pesos por dólar, el café colombiano mantiene su competitividad en los mercados globales.
La FNC, junto con Almacafé, publicaron los precios del café en las principales ciudades de Colombia, reflejando variaciones locales. En Armenia, la carga de café llegó a 2.595.500 pesos, mientras que en Bogotá fue de 2.594.250 pesos. Ciudades como Pereira y Santa Marta también mostraron precios cercanos a los 2.595.000 pesos por carga.