Tropas del Batallón de Infantería N.º 14 Capitán Antonio Ricaurte del Ejército Nacional de Colombia, en coordinación con la Dirección Antinarcóticos de la Policía Nacional, reportaron la incautación de dos vehículos tipo camión que se movilizaban en una vía del departamento del Cesar, transportando más de 8.700 galones de insumos líquidos, avaluados en más de 2.647 millones de pesos.
Según reportes oficiales, los hechos ocurrieron en el sector conocido como Sanín Villa, en la vía que conduce desde Aguachica hacia Río de Oro (Cesar, norte de Colombia), donde las Fuerzas Militares y la Policía instalaron un puesto de control en el territorio.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.
En el momento en que las autoridades inspeccionaron los dos vehículos de carga, se encontraron 165 canecas de acetona de 55 galones que tenían como destino la región del Catatumbo (Norte de Santander), sitio donde operan varias estructuras armadas como el ELN y las disidencias de las Farc.
Lo curioso del hecho es que los dos conductores de los camiones intentaron sobornar a los militares, donde llegaron a ofrecer hasta 100 millones de pesos para que el material pudiera seguir su curso hasta la región nortesantandereana. Sin embargo, los soldados rechazaron la oferta y judicializaron a los implicados, un acto que, para la institución castrense, reafirma su compromiso con los principios de transparencia y los valores institucionales.
“Con este resultado se evita una potencial producción de más de 8 toneladas de clorhidrato de cocaína, base financiera de los grupos armados organizados que delinquen en el departamento de Norte de Santander”, informó el Ejército colombiano en un comunicado.
Entre tanto, el material incautado fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para su correspondiente análisis. Por su parte, el Ejército nacional de Colombia manifestó que continuarán trabajando en esta región del norte del país, con el fin de neutralizar las actividades delictivas de los grupos armados organizados que delinquen en el territorio nacional.
“El Ejército Nacional sostiene su compromiso en la lucha contra los factores de inestabilidad y reafirma el respeto y la dignidad de sus hombres, actuando siempre con honor en el cumplimiento de la misión constitucional y neutralizado el accionar delictivo de grupos y personas que atentan contra la seguridad e integridad de la población”, puntualizó el Ejército en el comunicado.
Desmantelan laboratorio clandestino en Norte de Santander
Este operativo se suma a otros esfuerzos recientes de las fuerzas de seguridad para combatir el narcotráfico en el país. Es el caso del desmantelamiento de un laboratorio para el procesamiento de clorhidrato de cocaína, ubicado en el sector de Aguas Claras, zona rural del municipio de Ocaña (Norte de Santander, norte de Colombia).
Según información suministrada por el Ejército nacional, fueron incautados más de 1300 galones de sustancias químicas que iban a ser utilizadas para el procesamiento del alcaloide. Así mismo, las tropas militares encontraron 800 galones de clorhidrato de cocaína en solución, 500 galones de base de coca en solución, una prensa, una secadora, una gramera, un marciano y marquillas para identificar el producto durante su transporte y comercialización.
El Ejército Nacional destacó que esta incautación representa un duro golpe para las finanzas de los grupos ilegales que controlan la producción y distribución de drogas en la región. “Seguiremos golpeando la cadena del narcotráfico y desarticulando las redes que financian la violencia en nuestro país”, destacó la institución militar en un comunicado.
El departamento de Norte de Santander, específicamente en la región del Catatumbo, ubicada en la frontera con Venezuela, ha sido históricamente un territorio estratégico para el narcotráfico debido a su ubicación geográfica y la presencia de cultivos ilícitos.
Los insumos químicos como la acetona son esenciales en el proceso de producción de cocaína, y su transporte y distribución son controlados por redes criminales que operan en la zona. Según las autoridades, la incautación de estos materiales representa un golpe significativo para estas organizaciones, al interrumpir su cadena de suministro y limitar su capacidad de producción.