La Policía bonaerense detuvo hoy a tres jóvenes de 19, 17 y 14 años, acusados de golpear ferozmente y provocarle la muerte a Ezequiel Altamira, de 16, a la salida del boliche “The Club, anteriormente conocido como “Club Leloir”, en medio de un robo.
Altamirano fue encontrado sin vida ayer sábado tras una salida nocturna en la zona de Udaondo, partido de Morón. Gracias a las investigaciones de la DDI Morón y la Fiscalía N°2 de Ituzaingó, se logró la aprehensión de estos tres jóvenes, dos de los cuales son hermanos. Las cámaras de seguridad y los testimonios de personas presentes en el ataque fueron clave para reconstruir la violenta secuencia que terminó con la vida del adolescente.
La última noche de vida de Altamira comenzó como una salida común de jóvenes en Ituzaingó junto a sus seis amigos. Pasadas las tres de la mañana, el grupo salió de la disco y, mientras se dirigían a una plaza cercana, se toparon con un grupo de al menos ocho jóvenes. En algún momento se inició una disputa, y según los testimonios recabados por la Policía, Altamira fue violentamente agredido por miembros de este otro grupo.
La madre de uno de los amigos de la víctima, Andrea Navarro (41), relató a las autoridades que tras la pelea, los jóvenes volvieron a una casa donde se hospedaban para descansar. Sin embargo, al despertar, notaron que Altamira no respondía. Intentaron auxiliarlo, pero al ver que no reaccionaba, llamaron a emergencias. Minutos después, el móvil de Emergencias Médicas de Ituzaingó (EMI) arribó al lugar, y la médica de guardia confirmó que Altamira había fallecido.
La noticia del trágico fallecimiento de Altamira movilizó a la comunidad y a las fuerzas de seguridad de Ituzaingó. Detectives de la DDI Morón, junto con el EPDS Ituzaingó, comenzaron inmediatamente las investigaciones, recogiendo tanto material de las cámaras de seguridad de la zona como testimonios de vecinos y testigos presenciales. Las grabaciones captaron el desplazamiento de cuatro sospechosos en la madrugada del 26 de octubre, todos vestidos de modo particular, lo cual facilitó su identificación.
En las imágenes se observa cómo, alrededor de las 04:16 horas, los jóvenes salen de una propiedad en la misma zona de Udaondo y se dirigen hacia la plaza donde ocurrió el ataque. A las 05:34 horas, los mismos individuos regresan al inmueble, aparentemente cambiándose de vestimenta para evitar ser reconocidos.
Según el informe policial, en la grabación se puede ver a uno de los sospechosos, un joven vestido con buzo blanco, golpeando a Altamira con una manopla, lo que aparentemente lo dejó inconsciente antes de que los agresores le robaran el celular.
Los testimonios recopilados por los detectives permitieron identificar al agresor principal como Pedrozo (19), conocido por el alias de “Toto”. A este se sumaba su hermano menor, Pedrozo (14), alias “Chicho”, junto con otro joven identificado como Maidana (17) y un cuarto, llamado Mateo, cuya participación sigue bajo investigación.
Con la autorización de la Fiscalía N°2 de Ituzaingó, a cargo de la Dra. Bonini, se realizaron este domingo por la mañana dos allanamientos buscando a los sospechosos y posibles pruebas. En el primer objetivo, una vivienda en Udaondo, la Policía logró aprehender a Maidana, encontrando además ropa y calzado que coinciden con los descriptos en las cámaras de seguridad.
En el segundo inmueble, ubicado en la misma área, los efectivos detuvieron a los hermanos Pedrozo. Se incautaron prendas de vestir utilizadas en la noche del crimen, las cuales fueron reconocidas a través de las grabaciones. La Dra. Bonini, tras el análisis de los elementos secuestrados, decidió remitir el caso a la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N°1, dirigida por el Dr. Rodríguez Rey, quien dispuso la aprehensión de los tres detenidos por el delito de homicidio en ocasión de robo.
El fiscal Rey ordenó la presentación de los tres detenidos para este lunes 30 de octubre. Se espera que en la audiencia inicial se expongan los cargos específicos contra cada uno y se determine la situación procesal de los implicados. La gravedad del caso y la joven edad de los involucrados abren un debate en torno al tratamiento penal juvenil y las posibles sanciones a aplicar.