El presidente Donald Trump firmó este miércoles nuevas órdenes ejecutivas sobre inmigración, que intensifican su enfoque sobre la seguridad fronteriza. En una ceremonia celebrada en la Casa Blanca, el mandatario aprobó la Ley Laken Riley, que amplía las facultades de las autoridades migratorias para arrestar a migrantes acusados de delitos, incluidos los menores, sin requerir un juicio previo. Además, Trump ordenó el traslado de migrantes indocumentados a la prisión de Guantánamo, Cuba.

La Ley Laken Riley: refuerzo de las políticas migratorias

La Ley Laken Riley, nombrada en honor a una joven estadounidense asesinada por un migrante indocumentado, se convirtió en uno de los pilares clave de la agenda migratoria de Donald Trump. Esta nueva normativa otorga mayores poderes a las autoridades federales, permitiéndoles la detención de migrantes acusados de delitos sin necesidad de una condena previa. Durante la firma de la medida, Trump afirmó que “salvará innumerables vidas” y destacó que su objetivo es frenar un peligro “sistemático” para los ciudadanos estadounidenses.

El presidente estadounidense Donald Trump sostiene un documento luego de promulgar la Ley Laken Riley durante un evento en la Sala Este de la Casa Blanca, en Washington

La legislación recibió la aprobación del Congreso con un respaldo mayoritario de los republicanos, aunque contó también con apoyo bipartidista. Desde la Casa Blanca, se celebró este avance, a la vez que se destacó que la medida busca proteger a los estadounidenses de los “criminales extranjeros” que se encuentran en el país de manera ilegal. Esta iniciativa, que fue una de las promesas clave de campaña de Trump, llega en un contexto de creciente polarización sobre la inmigración en Estados Unidos.

Guantánamo: la nueva frontera de la detención migratoria

El mismo día, Trump anunció que los migrantes considerados “los peores criminales” serían trasladados a la prisión de Guantánamo, Cuba. En sus palabras, “tenemos 30.000 camas en Guantánamo para detener a los peores delincuentes extranjeros”. El presidente mencionó la base naval estadounidense, que ya alberga un centro de detención migratorio, y detalló que su intención es expandir su capacidad para recibir a más personas.

Trump quiere ampliar la capacidad de la cárcel de Guantánamo para enviar a los detenidos indocumentados

En este contexto, Tom Homan, conocido como el “zar de la frontera” afirmó que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés) será el encargado de supervisar la expansión del centro de detención en Guantánamo. Según Homan, la instalación ya fue utilizada en el pasado para migrantes cubanos y haitianos, pero ahora se ampliará para alojar a migrantes considerados de alto riesgo.

Este anuncio generó reacciones en diferentes frentes. En Cuba, el presidente Miguel Díaz-Canel lo calificó como un “acto de brutalidad”. El mandatario, según señala SwissInfo, reprobó la idea del Gobierno del republicano y aseguró que, de ponerse en marcha, culminará con los migrantes en “las conocidas cárceles de tortura y detención ilegal” dentro la instalación estadounidense.

Trump va por quienes apoyaron a Palestina

Además de estas nuevas normativas, Trump firmó recientemente una orden ejecutiva que tiene como objetivo rastrear y sancionar a estudiantes y profesores extranjeros que participaron en protestas a favor de Palestina, aplicando sanciones que incluyen la deportación.

Trump firma una orden ejecutiva para rastrear y sancionar a estudiantes y profesores extranjeros vinculados a protestas a favor de Palestina, con sanciones que incluyen la deportación

Estas acciones buscan eliminar lo que Trump considera “amenazas a la seguridad nacional” y son una muestra más de su estrategia de deportación masiva.