De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la actividad física, de manera constante, es beneficiosa para el bienestar del cuerpo y la salud mental, independiente de la edad de las personas. Sin embargo, mantener una rutina de ejercicios regular en adultos mayores puede ayudar a prevenir y controlar enfermedades no transmisibles como la diabetes, la hipertensión o las cardiovasculopatías.

Además, según el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores de México, un envejecimiento activo tiene múltiples beneficios como el aumento en la resistencia cardiopulmonar y la adaptación a estímulos externos.

Por su parte, el doctor Sergio Salvador Valdés, director de Atención Geriátrica del INAPAM, menciona que el sedentarismo en adultos mayores de 65 años puede ocasionar el deterioro físico y mental de una manera más rápida.

El ejercicio en personas de la tercera edad disminuye la mortalidad un 31%

A su vez, la OMS resalta que el 31% de las personas de la tercera edad, para 2024, no cumplieron los niveles de actividad física recomendados, por lo que se espera que, para el 2030, se logre disminuir las cifras de inactividad a la mitad.

Los beneficios del ejercicio en personas mayores

Un estudio publicado en la revista Canadian Medical Association Journal demostró que realizar de manera frecuente actividades de tipo deportivo, no solo mejora la calidad de vida de los adultos mayores, sino que, además, aumenta sus probabilidades de hacerla más prolongada.

En ese sentido, los investigadores resaltan que las limitaciones físicas que aparecen con el paso de los años no deben ser consideradas un impedimento para incluir una rutina de entrenamiento semanal.

Las limitaciones físicas de la tercera edad no deben eliminar el ejercicio de la vida diaria

Adicionalmente, la doctora Jane Thornton, directora de Salud, Medicina y Ciencia del Comité Olímpico Internacional, destacó la importancia de incluir ejercicios con adaptaciones adecuadas para reducir el riesgo de sufrir enfermedades crónicas y fomentar otros beneficios:

  1. Reduce el riesgo de presentar diabetes tipo 2, osteoporosis y demencia.
  2. Reduce en un 31% los índices de mortalidad.
  3. Fortalece los músculos y mejora la movilidad del cuerpo.
  4. Previene las caídas de alto impacto.
  5. Disminuye los síntomas de la depresión y la ansiedad.
  6. Mejora las habilidades sociales.
  7. Ayuda a prevenir el deterioro cognitivo.
  8. Mejora la densidad ósea.
  9. Optimiza la movilidad del cuerpo.
  10. Incrementa la capacidad cardiorrespiratoria.
  11. Merma el consumo de medicamentos.
  12. Mayor productividad.
  13. Contribuye con el funcionamiento del sistema inmune.
  14. Mejora el equilibrio.
  15. Fortalece las articulaciones.

Por Sthephany Guzmán Ayala