Las redes sociales y plataformas como Google o TikTok se han convertido en herramientas clave para los bares y restaurantes, son instrumentos clave para atraer nuevos clientes. Sin embargo, también representan un desafío, ya que permiten a cualquier usuario opinar públicamente sobre un establecimiento, lo que genera una presión adicional para los trabajadores del sector.
Jesús Soriano, conocido como Soy Camarero, lleva siete años visibilizando las dificultades de la hostelería en España. El utiliza sus perfiles en Instagram, X y TikTok para denunciar las largas jornadas laborales, la falta de días libres o los sueldos por debajo del mínimo legal. Además, también analiza el impacto de las reseñas online, que pueden afectar gravemente la reputación de un negocio.
La última denuncia de ‘Soy Camarero’
“Quién tiene razón aquí”, escribe ‘Soy Camarero’ en una de sus últimas publicaciones en X. Con estas cuatro palabras, Soriano ha podido sintetizar el debate que sobrevuela a una nueva polémica en las reseñas de Google.
“Pongo una estrella porque Google no me deja poner menos”, escribe un cliente en el portal de reseñas en línea. Él aseguraba haber “sido víctima de un engaño del concurso de tapas”. En su caso, desde el primer mordisco a la tapa no pudieron continuar con la comida: “Era incomible”, asegura. Además, también quedaron descontentos con el trato de los trabajadores. “La camarera, al ver nuestras tapas intactas,”, lo único que preguntó era que si habíamos terminado, y se fue sin esperar respuesta. A la hora de cobrar nos hizo pagar ambas tapas”. “Una experiencia totalmente recordable”, concluye irónicamente.
Ante este comentario, el propietario del local no ha dudado en responder. “Siento mucho tu mala experiencia con la tapa Luis, pero en ningún momento engañamos a nadie”, empieza diciendo. Después, el hostelero ha querido remarcar que las consumiciones hay que pagarlas. “Siento mucho que hayas tenido que pagar algo que pediste, se tuvo que elaborar, y al no comerlo tirarlo”, apunta.
Para terminar, el propietario ha querido señalar que dejar este tipo de reseñas puede dañar gravemente la imagen de los establecimientos. “Si en vez de poner mala cara hubieras explicado la situación, todo podría ser diferente, pero para gente mala están las reseñas en Google”
Cómo afectan las reseñas de Google a bares y restaurantes
Jesús Soriano lo ha expresado en repetidas ocasiones: las reseñas online pueden determinar el futuro de un negocio. La relación entre estos comentarios y la reputación de bares y restaurantes es directa. Cuantas más valoraciones positivas acumula un establecimiento, mayores son sus posibilidades de atraer nuevos clientes, lo que se traduce en un incremento de su rentabilidad. En algunos casos, incluso, el sueldo de los empleados depende de estas opiniones.
Propietarios y camareros recalcan la necesidad de ser honestos y prudentes al escribir reseñas en plataformas como Google. Los resultados que arrojan los buscadores son decisivos a la hora de posicionar un restaurante frente a sus competidores. Una mala valoración, aunque sea aislada, puede afectar significativamente la percepción de los potenciales clientes.
Por su parte, a la hora de responder a la pregunta de Soriano, la mayoría de los usuarios coinciden en que “al cliente puede no gustarle la comida, pero de pagarla la tiene que pagar igual”.