En primavera, las personas suelen empezar a preocuparse más por la apariencia de su jardín. Es que en esta época del año es especialmente agradable llegar a casa y ver los rincones verdes florecidos, para sentir el perfume natural de las plantas. Sin embargo, esta no es una tarea fácil. Para lograr que esto suceda, la mayoría de las especies necesitan un exhaustivo cuidado anual para el que no todos tienen tiempo.

Sin embargo, existen varias plantas que perduran en el tiempo y florecen sin falta sin la necesidad de invertir horas en su cuidado. Este es el caso de la Rosa Iceberg, una trepadora que se convirtió en tendencia esta temporada gracias a su belleza, aroma dulce y practicidad. Esta es la elección perfecta para aquellos que quieren disfrutar de un oasis floral en casa sin tener que dedicarle cada segundo libre a arreglar el jardín.

La Rosa Iceberg es versátil y aromática

Aunque no muchos la conocen, la Rosa Iceberg es una variedad muy popular entre los amantes de la jardinería. Se trata de una especie de rosa floribunda, motivo por el que produce racimos de flores en múltiples grupos a lo largo de la temporada de crecimiento y se la ve florecida casi los 365 días del año.

Sus flores tienen una forma clásica de rosa, con pétalos suaves y bien definidos, y se caracterizan por ser dobles y contar con múltiples pétalos. Si bien generalmente son blancas, en algunos lugares del mundo se pueden encontrar variantes rosa claro de esta especie. Aunque es cierto que son perfumadas, su fragancia no es tan marcada e invasiva como la de otras plantas similares, sino que es más bien suave y delicada.

Gracias a su tamaño y versatilidad, la Rosa Iceberg es ideal tanto para grandes jardines como para pequeños patios internos y balcones. En caso de dejarla crecer, puede llegar a alcanzar entre 1 y 1.5 metros de altura. Además, es muy fácil de cultivar y es ideal para quienes están empezando a incursionar en el mundo de la jardinería. Dentro de su especie, es una de las más fáciles de mantener en el tiempo porque es resistente a todas las condiciones climáticas.

Arbusto de Rosas Iceberg

Condiciones ideales para el cultivo de la Rosa Iceberg

Si bien es cierto que la Rosa Iceberg se adapta a varias condiciones climáticas y no necesita demasiados cuidados, existen algunos consejos que, si se tienen en cuenta, pueden asegurar que la especie se luzca y florezca sin falta todo el año. A continuación, un listado con las más importantes:

  • Ubicarla en un lugar con buena luz: lo ideal es que esta planta esté expuesta al sol por lo menos seis horas al día. En caso de ponerla en semisombra, la especie se va a acostumbrar, pero la floración no será continua.
  • Plantarla en tierra apropiada: el suelo debe estar bien drenado y ser rico en materia orgánica.
  • Regarla correctamente: esta especie requiere riegos regulares, pero moderados, por lo que hay que evitar a toda costa la formación de charcos de agua que indiquen exceso.
  • Podarla regularmente: los expertos recomiendan una poda anual para que el aire circule entre las ramas y disminuya el riesgo de plagas en la planta. Lo ideal es que esto se haga ni bien finaliza la temporada de invierno.