El sur de Estados Unidos, conocido por su clima cálido, enfrentó una situación sin precedentes tras una tormenta invernal que cubrió de hielo y nieve varias ciudades. En Nueva Orleans, una empresa de gestión de residuos reutilizó un camión normalmente diseñado para rociar agua con fragancia de limón para ablandar el hielo acumulado.

De acuerdo a Local 10, Sidney Torres, presidente de IV Waste, servicio de gestión de residuos en Nueva Orleans, Luisiana, destacó la creatividad necesaria para abordar esta situación. Este tipo de acciones demuestra cómo las soluciones destinadas a otras actividades pueden adaptarse para enfrentar retos que son inesperados.

Dado que muchas ciudades del sur carecían de equipos para el manejo de nieve, estados vecinos como Arkansas enviaron quitanieves, esparcidores de sal y otros vehículos especializados a Luisiana

La demanda de sal superó los suministros disponibles, lo que dificultó el tratamiento de las carreteras. La colaboración interestatal resultó esencial para abordar esta emergencia porque permitió una respuesta más efectiva y coordinada.

La tormenta invernal que azotó el sur de EE.UU.

La tormenta causó estragos en la infraestructura y afectó la vida cotidiana. En Carolina del Sur, la nieve derretida que se recongeló durante la noche mantuvo cerrados puentes y carreteras, mientras que las escuelas permanecieron clausuradas en varios estados. En Alabama, las bajas temperaturas también generaron preocupaciones por la congelación de tuberías. Muchas familias enfrentaron interrupciones en los servicios básicos, mientras que las autoridades trabajaban para restaurar la normalidad.

En Covington, Georgia, un residente utilizó un lanzallamas para derretir el hielo en las calles de su vecindario. Este método poco convencional refleja cómo los habitantes del sur adaptaron herramientas comunes para enfrentar un clima inusual.

Las tormentas invernales pusieron en jaque a varias localidades (Foto: Archivo)

Récords inesperados y fuertes desafíos

Las nevadas rompieron marcas históricas en lugares como Savannah, Georgia, y el norte de Florida. En Savannah, se registraron acumulaciones no vistas desde 1989, mientras que en Florida un informe preliminar indicó que 10 pulgadas (25 centímetros) de nieve podrían establecer un nuevo récord estatal.

Las carreteras del sur, diseñadas para climas cálidos, no están preparadas para soportar nieve y hielo. Esto generó numerosos accidentes y complicó el transporte, con cierres prolongados en carreteras y puentes importantes. En Carolina del Norte, las condiciones resbaladizas se mantuvieron durante días, y las autoridades tuvieron que implementar toques de queda nocturnos en varias ciudades para evitar accidentes.