os cuerpos eran enterrados con un ajuar que podía incluir herramientas, armas, objetos personales y ofrendas / Momias museo de el carmen - mexico

En el contexto del Día de Muertos, Patricia Olga Hernández Espinoza, antropóloga física, ofrecerá una conferencia sobre las prácticas funerarias y ritos mortuorios en infantes y niños en la antigüedad en el estado de Sonora.

Este evento se llevará a cabo el viernes 25 de octubre de 2024 a las 17:00 horas en el Museo Regional de Sonora, ubicado en la Antigua Penitenciaría. La conferencia forma parte del ciclo “Tardes de CafeINAH”, organizado por la representación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Sonora.

La antropóloga explicará cómo los ajuares funerarios de los niños reflejaban su valor social, según documentos de los religiosos que misionaron en la región que hoy es Sonora.

Estos ritos reflejaban las creencias espirituales y las relaciones con su entorno y su concepción del más allá.
FOTO: INAH

Durante su presentación, Hernández Espinoza explorará las investigaciones realizadas en el norte de México sobre las prácticas funerarias antes y después de la llegada de los misioneros, con un enfoque particular en el siglo XVIII.

Las evidencias arqueológicas respaldan estas observaciones, mostrando un cambio en la visión de los entierros con la llegada de los misioneros, donde el estatus familiar comenzó a ser más evidente.

El ciclo “Tardes de CafeINAH” se celebra el último viernes de cada mes y tiene como objetivo acercar al público las actividades y programas del INAH en la preservación del patrimonio cultural de Sonora. La conferencia está abierta al público en general y también se transmitirá en línea a través del perfil de Facebook “Antropología e Historia en Sonora”.

La cita es en la Sala de Lectura de la Biblioteca Ernesto López Yescas, dentro del Museo Regional de Sonora, en la calle Jesús García final s/n, colonia La Matanza. Este evento es una oportunidad para conocer más sobre la historia y cultura de la región a través de la mirada experta de Hernández Espinoza.

El ciclo “Tardes de CafeINAH” se celebra el último viernes de cada mes y tiene como objetivo acercar al público las actividades y programas del INAH en la preservación del patrimonio cultural.
FOTO: INAH

Cómo eran los ritos funerarios en el norte de México

Los rituales funerarios de los asentamientos humanos en el norte de México antes del siglo XVIII variaban entre las diferentes culturas indígenas, pero compartían algunos elementos comunes. Entre las comunidades indígenas del desierto, como los nómadas cazadores-recolectores, los rituales eran más sencillos debido a su estilo de vida itinerante.

En ese contexto, muchos grupos enterraban a sus difuntos en tumbas poco profundas, a menudo en posición fetal. Esto simbolizaba un retorno al vientre de la Madre Tierra. Las tumbas solían estar marcadas por piedras o montículos.

Otro elemento importante era que los cuerpos eran enterrados con un ajuar que podía incluir herramientas, armas, objetos personales y ofrendas. Estos objetos se creía que ayudarían al difunto en la otra vida.

En algunas culturas, se evitaba el contacto directo con los cadáveres por razones espirituales, utilizando herramientas rudimentarias para el entierro. En algunos casos, las ceremonias de duelo podían incluir cantos, danzas y la narración de historias.

La comunidad participaba en estos actos para honrar al fallecido y ofrecer consuelo a los familiares.

Aunque menos común, en algunas zonas se practicaban ceremonias de cremación. Las cenizas podían ser enterradas o esparcidas en lugares especiales. Algunas tribus utilizaban sitios específicos para los entierros que estaban asociados con mitos o leyendas locales, vinculando la muerte con el paisaje espiritual de la región.