Es difícil encontrar el diagnóstico de esta enfermedad

En los últimos años, los casos de cáncer de colon entre las personas jóvenes han aumentado hasta el punto de hacer saltar la voz de alarma. Aunque tradicionalmente esta enfermedad estaba asociada a personas mayores de 50 años, estudios recientes muestran que cada vez son más las personas jóvenes que están siendo diagnosticados con cáncer colorrectal.

En 1995, los casos de esta enfermedad en menores de 55 años suponía el 11%. Casi tres décadas más tarde, en 2019, los casos han aumentado hasta un 20%, casi duplicando la tasa de cáncer colorrectal, según un estudio publicado por la Sociedad Americana del Cáncer.

Cáncer de colon

Para algunos, es “alarmante” e “inquietante”, otros, lo consideran un “problema mundial” o una “alerta global”, según los científicos consultados por la BBC.

El cáncer colorrectal es el tercero más común a nivel mundial entre los hombres y el segundo entre las mujeres, explica la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Este tumor afecta al intestino grueso y al recto (parte final del intestino grueso). Es uno de los que genera mayor impacto en la salud y la calidad de vida de los pacientes.

Aunque en algunas partes del globo terráqueo, los casos de este cáncer se han mantenido estables para las personas mayores, es preocupante que los jóvenes están siendo diagnosticados en las últimas etapas de la enfermedad, lo que hace más difícil su tratamiento y cura. Se estima que el cáncer de colón causará alrededor de 53.000 muertes en Estados Unidos este año.

Señales del cáncer

Afortunadamente, hay seis señales claras a las que los jóvenes deben prestar mucha atención. Los expertos recomiendan consultar a un profesional de la salud si se experimenta cualquiera de los siguientes síntomas:

Sangrado rectal:

Una investigación reciente ha descubierto que el síntoma más común de este cáncer en personas jóvenes es el sangrado rectal. Casi la mitad de los diagnosticados han dicho que han encontrado sangre en el papel higiénico o en la taza de inodoro.

“Los tumores de colon de las personas más jóvenes suelen desarrollarse en la última porción del recto”, ha señalado la oncóloga Andrea Cercerk. “La sangre de estos tumores tiene que viajar una distancia más corta, por lo que sale de color rojo brillante, mientras que la sangre que ha estado en el tracto digestivo durante un tiempo puede verse casi negra”, ha añadido.

Cambios en los hábitos de evacuación:

“A menudo, un tumor en el colón o en el recto es como una obstrucción en una tubería, cambia la forma en que defecas”, ha indicado el Dr. Tiago Biachi, oncólogo gastroenterólogo. “Eso puede provocar estreñimiento frecuente, diarrea o ambas cosas. En otros casos, las personas no se sienten vacías después de defecar o notan que sus heces tienen un aspecto diferente al de antes”, ha comentado.

Por otro lado, el Dr. Michael Cecchini, codirector del programa colorrectal del Centro de Cánceres Gastrointestinales y oncólogo en Yale (Nueva York) ha dicho que “los pacientes con cáncer de colon suelen tener las heces muy líquidas”.

Dolor o calambres abdominales:

El dolor abdominal persistente, concretamente los dolores que coinciden con la hora de comer, es un aviso de nuestro cuerpo de un posible padecimiento de cáncer de colon, aunque es más habitual que se atribuya a otros dolores como cólicos, acidez o infecciones.

No obstante, “si el dolor intestinal es más nuevo o diferente a lo que se ha experimentado antes, esa es una razón para consultar al médico”, ha declarado la Dra. Sonia Kupfer, directora de la Clínica de Prevención y Riesgo de Cáncer Gastrointestinal en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chicago (EEUU).

Pérdida de peso inexplicable:

“Los tumores colorrectales pueden liberar hormonas que se pueden suprimir gravemente el apetito”, ha dicho el Dr. Biachi. En un estudio reciente realizado por varios doctores en Medicina y Salud Pública se ha revelado que el 15% de los jóvenes habían perdido el apetito entre cuatro y seis meses antes de su diagnóstico.

Anemia:

El sangrado provocado por los tumores en el colon puede derivar en anemia con el tiempo, una afección que ocurre cuando el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos.

Los síntomas más comunes son la fatiga, manos y pies fríos, caída del cabello, uñas quebradizas, problemas cognitivos (confusión mental), disminución del rendimiento deportivo, dificultad para respirar, antojos de comida basura, dolores de cabeza trastornos de sueño.

Fatiga extrema:

Como otros tipos de cáncer, esta enfermedad lleva al extremo a nuestro sistema inmunológico, llevando a la persona que lo sufre a un agotamiento total. Aproximadamente, el 8% de los pacientes han manifestado síntomas de fatiga extrema en los meses previos a su detección.

Las mismas hormonas generadas por el tumor puede reducir el apetito que puede llevar al agotamiento de la energía y contribuir al malestar general.