La caballa contiene omega-3, ácidos grasos que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, combatir infecciones y reducir el riesgo de alergias (Topik Restaurant)

En septiembre de 2022, el Ministerio de la Producción del Perú elaboró un Programa Nacional llamado “A comer pescado”, con el objetivo de promover el consumo de pescados entre los peruanos por lo menos tres veces por semana.

Entre estos alimentos marinos ricos en omega-3 se encuentran los llamados pescados azules y uno de ellos se destaca porque reduce el colesterol, mejora la memoria y refuerza el sistema inmunológico. Se trata de un superalimento peruano: la caballa.

La caballa, un superpescado azul

La caballa pertenece a los pescados azules, que son considerados auténticas joyas gastronómicas por su excelente valor nutricional (La Vanguardia)

La caballa, al igual que la anchoveta, el atún o el jurel, entre otros, pertenece a los pescados azules, que son considerados auténticas joyas gastronómicas por su excelente valor nutricional, su sabor y su versatilidad. Los peruanos son afortunados porque este pescado está disponible durante todo el año, pero especialmente entre los meses de octubre a febrero.

Al ser rica en ácidos grasos omega-3, vitaminas y minerales, la caballa ofrece múltiples beneficios nutricionales por lo que es conocida también como parte de los “superpescados azules”:

  • Grasa saludable: un pescado azul como la caballa es rico en grasa insaturada, especialmente omega 3, lo que contribuye a reducir el riesgo cardiovascular, disminuir la presión arterial y, en general, promover la salud del corazón.
  • Vitaminas esenciales: este tipo de pescado es una excelente fuente de vitaminas como la D, A y las del grupo B, incluyendo B1, B12 y B6.
  • Minerales clave: además, contiene minerales como el fósforo y el calcio.
  • Proteínas de calidad: la caballa es fuente de proteínas de alto valor biológico como la lisina y la metionina. Ambos son aminoácidos que cumplen diversas funciones clave, como favorecer el aumento de la masa muscular, reforzar el sistema inmunológico y asistir en el proceso de cicatrización de heridas.
  • Bajo en carbohidratos: su bajo contenido de carbohidratos lo convierte en una opción favorable para quienes buscan reducir calorías y perder peso.

La caballa reduce el colesterol

Entre los diferentes omega-3 que contiene la caballa se encuentra el ácido docosahexaenoico, que ayuda a mejorar la memoria (Pescaderia Salgado)

La caballa es rica en ácidos grasos omega-3, que ayudan a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, y a mejorar la salud cardiovascular.

Además, según Mayo Clinic, los omega-3 son un tipo de ácido graso insaturado que pueden tener beneficios para la salud del corazón porque disminuyen la acumulación de placa, que endurece y bloquea las arterias; ayudan a bajar ligeramente la presión arterial; reducen la inflamación en el cuerpo, que puede dañar los vasos sanguíneos; y aumentan el colesterol de lipoproteína de alta densidad (HDL), que es el colesterol bueno.

La caballa mejora la memoria

Entre los diferentes omega-3 que contiene la caballa se encuentra el ácido docosahexaenoico (DHA), que ayuda a mejorar la memoria, la concentración y la función cognitiva.

El DHA tiene un impacto en la salud cerebral porque se acumula en el hipocampo, una región relacionada con la memoria; aumenta la transmisión de impulsos nerviosos en las neuronas, lo que permite que las células de la memoria se comuniquen mejor; puede ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas como la demencia y el Alzheimer; y puede mejorar la memoria episódica, que es la capacidad de recordar eventos personales en un lugar y tiempo específicos.

La caballa refuerza el sistema inmunológico

La caballa es especialmente rico en vitaminas del grupo B, como la B1, B2, B3, B6 y B12 (Productos del Mar de Noruega)

Los ácidos grasos omega-3 son esenciales para reforzar el sistema inmunológico y para prevenir enfermedades degenerativas. Estos ácidos grasos ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, combatir infecciones, reducir el riesgo de alergias y mejorar la resistencia general a las infecciones.

Los omega-3 son componentes importantes de las membranas celulares y tienen muchas funciones en el organismo. Entre sus beneficios para el sistema inmunológico se encuentran también los siguientes: modular la función de los neutrófilos, disminuir la producción de sustancias que estimulan la inflamación y prevenir daños celulares que pueden llevar a la aparición de cáncer.