El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se expande por México mediante alianzas estratégicas que incluyen incluso a sus enemigos. (Foto: Infobae)

En poco más de una década, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, ha extendido su poder por todo México, gracias a una estrategia de alianzas que incluye pactos hasta sus enemigos más acérrimos.

Estas alianzas, tanto con cárteles históricos como con organizaciones criminales locales, le han permitido al CJNG posicionarse como una de las fuerzas más peligrosas y dominantes del narcotráfico en el país, consolidando su control en regiones clave y desafiando la hegemonía de otros grupos.

La Nueva Familia Michoacana: colaboración en Tierra Caliente

Los hermanos Hurtado Olascoaga habrían forjado una alianza con el CJNG. (Infobae México/Jesús Avilés)

Una de las alianzas más significativas que ha tenido el cártel de las cuatro letras es con La Nueva Familia Michoacana, encabezada por los hermanos Hurtado Olascoaga.

En 2023, Insight Crime reveló que el CJNG suministró drones artillados a la LNF para que esta los empleara en la disputa contra grupos de autodefensas y otros enemigos en la región de Tierra Caliente en Guerrero, lo que resultó en el desplazamiento de cientos de familias.

Según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, esta alianza ha sido facilitada por un lugarteniente de la LNF, quien mantiene vínculos con Los Cuinis, la organización que se encarga del lavado de dinero del CJNG.

Los Cuinis, liderados por la familia política de El Mencho, funcionan como el “banco de los narcos”, lavando dinero para distintos cárteles y maximizando el flujo de efectivo de sus aliados. La LNF, beneficiada por esta colaboración, utiliza los contactos del CJNG para enviar heroína y fentanilo a través de Tamaulipas y Texas, rutas previamente dominadas por el Cártel del Golfo.

A pesar de rumores de ruptura en la relación entre el CJNG y la LNF en 2023, analistas como Jesús Lemus han comentado a Infobae que, aunque haya enfrentamientos locales y muchos altibajos, las cúpulas de ambos cárteles mantienen el pacto.

La resurrección del Cártel de los Arellano Félix

La familia de los Arellano Félix, que conformaron el Cártel de Tijuana.
(Foto:ARCHIVO/CUARTOSCURO)

En abril de 2024, la periodista Rosario Mosso del semanario Zeta reportó que una facción del Cártel de los Arellano Félix (CAF) se unió al CJNG para enfrentar al Cártel de Sinaloa en Baja California.

Este pacto estratégico entre Pablo Edwin Huerta Nuño, alias El Flaquito del CAF, y Javier Adrián Beltrán Cabrera del CJNG tiene como objetivo establecer control sobre Tijuana y Tecate. La pugna con el Cártel de Sinaloa ha intensificado la violencia en la región, con asesinatos de alto perfil de operadores de ambos bandos, reflejando el incremento de la lucha armada en áreas urbanas.

Recientemente, un video mostró a sicarios del CJNG en Tijuana amenazando a los líderes del Cártel de Sinaloa, afirmando: “Tijuana tiene dueño y es de las cuatro letras”, refiriéndose a las iniciales del CJNG.

Estos enfrentamientos culminaron con una narcomanta hallada en Mexicali, donde el CJNG acusaba a Rafael Orozco Vargas, Fiscal Central de Baja California, de ser un “vocero” de Sinaloa.

Los Chapitos: un giro inesperado

Los Chapitos y el CJNG: ¿amigos o rivales? (Jovani Pérez | Infobae México)

Ante la guerra intestina en el Cártel de Sinaloa, Los Chapitos —herederos de Joaquín “El Chapo” Guzmán— se han aliado con el CJNG para enfrentar a sus rivales internos, la facción de La Mayiza de Ismael “El Mayo” Zambada.

La captura de El Mayo y la acusación de que Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de El Chapo, facilitó su detención, ha intensificado las divisiones dentro del cártel, provocando una serie de enfrentamientos.

Según Illicit Investigations, la alianza se formalizó en una reunión en Nayarit, donde representantes de Los Chapitos y el CJNG acordaron unir recursos y hombres para expulsar a La Mayiza de estados clave como Zacatecas, Nayarit y Chiapas.

Como muestra de lealtad, Jesús Alfredo Guzmán Salazar fue trasladado a Jalisco bajo la custodia del CJNG. Esta coalición opera bajo el nombre de Fuerzas Especiales Unión (FEU), y cuenta con un logo simbólico que combina elementos representativos de ambos líderes, incluyendo un gallo y una pizza.

Sin embargo, hay quienes ponen en duda la alianza. Por ejemplo, la periodista Anabel Hernández ha comentado que ella no ha podido encontrar datos que confirmen dicho pacto; mientras que miembros de La Mayiza han asegurado a diversos medios que sí existe la alianza con los hijos de El Chapo Guzmán, pero sólo sería de una facción y no todo el CJNG.

Alianza en la CDMX

La organización criminal que encabeza Nemesio Oseguera Cervantes, alias

En la Ciudad de México, el CJNG ha establecido una nueva alianza con la Anti-Unión Tepito para disputar el control de la colonia Morelos, centro de operaciones de la Unión Tepito.

Reportes de Milenio indican que esta coalición incluye otros grupos menores y busca afianzar el dominio en actividades de narcomenudeo y extorsión. Los recientes enfrentamientos en Morelos, que dejaron seis muertos en octubre, han llevado al gobierno de Clara Brugada Molina a desplegar cientos de elementos de seguridad, apoyados por la Secretaría de Marina y el Ejército Mexicano.

Expansión transfronteriza: alianzas en Guatemala

La expansión del CJNG ha cruzado la frontera sur de México. En 2022, InSight Crime documentó la colaboración del CJNG con clanes guatemaltecos como Los Huistas, para el tráfico de cocaína y metanfetaminas. Esta alianza le ha permitido al CJNG establecer rutas de tránsito de droga y formar una red de contactos dentro de las fuerzas de seguridad guatemaltecas, asegurando el traslado de mercancía hacia México.

En 2024, un grupo armado que se identificó como el Cártel de Chiapas y Guatemala (CCyG), presuntamente aliado del CJNG, se presentó en Nueva Morelia, Chiapas, con amenazas hacia el Cártel de Sinaloa.

La expansión de estos grupos hacia la frontera ha generado un clima de violencia, principalmente en las regiones de Chicomuselo y Motozintla.

Las alianzas estratégicas del CJNG, que van desde colaboraciones con clanes locales hasta pactos con cárteles históricos, han consolidado su influencia en vastas áreas de México y Centroamérica. Este grupo ha encontrado en estos pactos una herramienta para contrarrestar rivales y afianzar su control, convirtiéndose en uno de los máximos protagonistas del crimen organizado.